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Esta no es la primera vez que ambos clanes se enfrentan. En la madrugada del 8 de abril de 2017 se enfrentaron a balazos a la salida de un boliche los miembros de ambos grupos. En esa pelea perdió la vida Roberto Zelarayán, que estaba con la gente que integra la barra de los “Decanos”.
Pese a que los familiares prefirieron mantenerse en silencio y hasta el momento no está confirmado el pago de $500.000, el responsable del mensaje no solo reconoció que aportaron esa suma de dinero, sino que además, utilizando malas palabras, dijo que ese monto es insignificante para su grupo.
En el mensaje, Ismael dejó en claro conocer todos los negocios que tiene “El Gordo” González y sus familiares. Por ejemplo, les dijo que “vendieran mucho fernet para comprar balas” refiriéndose a la venta de bebidas alcohólicas que realiza el Clan Acevedo en el estadio de Atlético. “Prefiero vender fernet y no droga como hacen ellos”, indicó el líder de La Inimitable.
"Decile al p... de Ezequiel que, si sabe dónde vive Maxi, que vaya. Ya va a ver cómo le va a quedar, va a salir lleno de agujeros".
"Decile al ‘Gordo’ Gustavo que cuide a la hijita y a la mujer, y que cuide a la madre de la mujer, porque ahora vamos a ir por todos".
"Vos pensás que nos vamos a ensuciar la mano. Les vamos a mandar 10, 15 cabezas de fierro para que todos los días los agarren a tiros. No me importa un p... Vayan sabiendo que está todo podrido, la c... de su madre".
“$ 500.000 no es nada. Nos limpiamos el o... con eso. Ahora, nos vamos a hacer p… entre todos, deciles a esos giles. Y todos los días va a ser así. Se va a pudrir todo”.
El audio fue grabado ayer a la mañana en Villa 9 de Julio, el lugar donde el Clan Toro ejerce su dominio territorial. El joven se lo nota acelerado y sólo hizo una pausa cuando una mujer le gritó.
Ismael también les habría anunciado a los del Clan Acevedo que contratarían a “cabecitas de fierro” para que ejecutaran el plan de venganza. Se refiere a los jóvenes que tienen a su servicio y que en los barrios son conocidos como “soldaditos”. Normalmente les pagan con dinero o con droga. También les dan medio de movilidad (motos) y armas para que cumplan con su misión.