El alperovichista Zecca MANDÓ A LA CHACARITA al padre Miguel Alderete Garrido por criticar la situación social

Lunes 22 de Mayo de 2017, 15:14

El papa Francisco recibe al padre Miguel Alderete Garrido, desterrado por el arzobispo Alfredo Zecca (der.), hombre de buen diente.



El arzobispo de Tucumán, Alfredo Zecca, decidió a fines de 2015 el traslado del sacerdote Miguel Alderete Garrido, a Buenos Aires, más precisamente al Cementerio de La Chacarita, a rezar responsos a los difuntos, por emitir un mensaje crítico sobre la situación social de Tucumán y lo que se vivía en la provincia luego de las elecciones del 23 de agosto.

En medio de las manifestaciones de protesta que fueron reprimidas por la policía en la Plaza Independencia, Alderete Garrido pronunció un mensaje en el que denunció la corrupción, el fraude y el abuso de poder en Tucumán. Además, invitó a los ciudadanos de todo el país a participar, a no quedarse en sus casas tomando mate y llamó al diálogo.

A través de YouTube y las redes sociales, bajo el título "Dios habla desde Tucumán - Los tucumanos gritan al país", se difundió la homilía que molestó tanto al alperovichismo y que terminó entre aplausos del público.

Consciente de las repercusiones que podrían tener sus palabras en una provincia donde la libertad de expresión está tan sesgada, el sacerdote adelantó en su discurso: "Si decir esto me cuesta la vida o el Ministerio, gloria a Dios".

Ante la decisión del arzobispo, el padre Miguel, quien es hipertenso y está delicado de salud, escribió en su blog: "Me mandan al cementerio de La Chacarita. Pero no se asusten, es para rezar por los difuntos y consolar al triste".

Zecca forma parte del círculo íntimo del ex gobernador José Alperovich, quien le gestionó millonarios subsidios del ladrón José López.