Cientos de renuncias de empleados públicos por el control de presentismo

Lunes 12 de Febrero de 2018, 09:58

A partir de un régimen más estricto, el Gobierno nacional retuvo $ 61,5 millones en el pago de sueldos por ausencias injustificadas. /Foto: La Nación



El control del presentismo implementado en las dependencias públicas nacionales a mediados de 2017 trajo aparejado un sistema de premios y castigos.

Mientras con la primera liquidación cuatrimestral, el 38% de los empleados públicos cobraron el premio a la asistencia perfecta, otro grupo tuvo descuentos en sus sueldos por faltas injustificadas.

El Gobierno retuvo más de $61,5 millones por deducciones a quienes se ausentaron sin previo aviso.

Paralelamente, de acuerdo con datos provistos por el Gobierno, en el último semestre de 2017 se registraron al menos 968 renuncias voluntarias de agentes estatales.

El presentismo en el Estado, que en 48 ministerios y organismos públicos ya se controla por sistema biométrico, plantea que aquellos que tengan asistencia perfecta cobrarán un plus de $5200 brutos de forma cuatrimestral.

En la primera liquidación, lo percibieron 36.131 empleados sobre 110.216 trabajadores públicos totales.

Otros 47.000 empleados cobraron $3540 por tener una falta justificada, mientras que los que faltaron dos veces recibieron $2080.

Mediante el control estricto, el Gobierno evitó pagar $61.540.000 por los descuentos implementados a los empleados que faltaron sin previo aviso ni justificación.

Las autoridades contabilizaron 55.794 ausencias injustificadas en el cuatrimestre posterior a la implementación del Reglamento General de Control de Asistencia y Presentismo, según datos a los que accedió la nacion. Es decir, en promedio, cada vez que un empleado falta un día a trabajar (sin licencia) pierde unos $1100.

El convenio colectivo de trabajo contempla el descuento del día cuando esa falta no está dentro del régimen de licencias, justificaciones y franquicias.

Según la información oficial, encabeza la planilla de faltas injustificadas la Comisión Nacional de Energía Atómica, con 18.510 ausencias sobre un total de 268.048 días totales trabajados (contabilizando los días hábiles de 3042 agentes durante cuatro meses).

La sigue la Administración Nacional de Laboratorios e Institutos de Salud (ex Malbrán), que tiene 7578 faltas, pero sobre un universo de 931 empleados, una proporción de casi un 10% de ausentismo.

En tercer lugar se ubica el Registro Nacional de las Personas (Renaper), con 5319 faltas.

Solo después de esos tres organismos figuran los ministerios.

En Agroindustria, donde trabajan 3550 agentes, se registraron 3891 faltas sin previo aviso, mientras que en Salud hubo otras 3492 sobre 2952 empleados. El sexto puesto es ocupado por Hacienda, donde se registraron 3010 faltas sin justificación.

En Modernización,
que conduce Andrés Ibarra (encargado de coordinar de manera transversal el sistema de presentismo), se registraron 2083 faltas injustificadas sobre un universo de 982 agentes, un 2,41% de ausentismo.

Entre las carteras y organismos con menos de diez faltas injustificadas se encuentran el Ministerio de Seguridad, la CNV, el Ministerio de Turismo, la Secretaría Legal y Técnica, la Sigen, la AABE, el Teatro Nacional Cervantes y el Orsna. "Si un empleado se toma todas las licencias permitidas, puede faltar sin descuentos más de 120 días. Hay que evitar las ausencias injustificadas", dijeron en el Gobierno.

En ATE, el gremio estatal más díscolo, su titular, Hugo "Cachorro" Godoy, resaltó en cambio que hubo casos donde "si una enfermedad demandó más de tres días el empleado no percibió el premio".

Y reclamó: "Queremos analizar los registros de descuentos del sueldo".


Las renuncias

A partir de la sistematización del presentismo, Cambiemos opera con un radar más preciso para controlar el empleo público.

El organismo con más renuncias fue la Jefatura de Gabinete.

Entre julio de 2017 y enero de 2018 se fueron 145 empleados sobre un total de 968 que se alejaron en toda la administración.

"En muchos casos son personas que no podían cumplir las ocho horas de presentismo porque tenían dos trabajos y requerían un horario más flexible. Hubo algunos casos aislados de pedido de renuncia porque se detectó que solo venían a colocar el dedo [en el lector], pero luego no trabajaban. También se detectó a una que persona vive en Brasil y otra en Mar del Plata", señalaron desde esa dependencia.

En Modernización fueron notificadas 151 renuncias. "Un importante porcentaje de las renuncias estuvieron ligadas a algún aspecto del régimen de presentismo", señalaron desde esa dependencia.

También se registró un número alto en la Biblioteca Nacional, donde explicaron: "Los motivos fueron varios: había algunas incompatibilidades y, sobre todo, muchos no podían cumplir los horarios por el presentismo".

En otras dependencias, como Transporte, rechazaron que las renuncias se debieran al control horario.

En el Hospital Posadas, donde se registraron unas 30 renuncias, hubo un cambio de régimen de contratación y muchos no aceptaron.

Desde ATE, Godoy explicó: "Puede ser que mucha gente tenga más de un trabajo por necesidad y no llegue a cumplir los horarios. Otros no quieren aceptar la precariedad de los contratos en simultáneo con los controles horarios más estrictos. Se impusieron cambios en las funciones de los empleados con malas formas que influyeron en las renuncias".



Fuente: http://www.lanacion.com.ar/2108566-descuentos-y-renuncias-de-empleados-publicos-por-los-controles-de-presentismo