Sábado 14 de Julio de 2018, 09:16
Cada persona tiene un temperamento diferente y reacción frente a cada
situación. Acá te dejamos un listado de cómo y por qué se enoja cada
signo del zodiaco y cómo hacer para remediar esta situación.
Aries
Aries
es un signo de temperamento apasionado y cuando se enoja provoca una
tempestad. Si la pelea es contigo, no se callará y te gritará las cosas
sin tapujos. Si el asunto es de gravedad, prepárate porque enfadado no
conoce la diplomacia. Hasta que no haya descargado toda la adrenalina no
entrará en razón. Tendrás que esperar a que se haya calmado para
argumentar o disculparte ya que todo terminará peor si te pones a
discutir.
Un consejo: Déjalo solo o por lo menos retírate… tu presencia le recordará todo lo que le has hecho constantemente.
Cuando
se haya enfriado, podrás dialogar sin problema y hasta te pedirá
disculpas si se ha equivocado o por su exagerada reacción. Los arianos
no suelen guardar rencor.
TauroTauro
es un signo tranquilo. Muy paciente, aguanta mucho hasta que en un
momento estalla y se convierte en una fiera. Si no te gusta verlo fuera
de si, no te empeñes en sacarlo de sus casillas. Cuando los taurinos se
enfadan, pueden llegar a la violencia física para lograr descargar tanta
tensión acumulada. Aunque esté muy furioso, siempre conserva una cuota
de racionalidad.
Una vez desatada su ira, no lo busques, no
trates de darle explicaciones y no lo apresures a nada porque su enojo
tarda bastante en desaparecer. Si te quiere, él mismo volverá para
arreglar las cosas. Si no te aprecia, olvídalo… Tauro puede guardar
resentimiento durante años o toda la vida. Es un signo constante tanto
con sus amores como con sus antipatías.
GéminisGéminis
es un signo de carácter alegre y antes de dramatizar sobre un problema
prefiere bromear. Ahora bien, una vez que se enoja, no se reprime ni se
guarda nada. En realidad, no duda en iniciar una batalla con su mejor
arma, la palabra. Jamás pierde su capacidad para argumentar y si la cosa
se pone fea, irá elevando su volumen, su tono y afilará su hiriente
lengua.
La discusión será devastadora, sin embargo e
increíblemente, quizás ni la recuerde al otro día. No es de guardar
rencor ni resentimiento. Si la cosa es grave, lo más seguro es que te
borre de su vida. Si lo humillas intelectualmente delante de los demás,
estará pendiente para poder vengarse de la misma manera.
Superada
la tempestad, Géminis prefiere solucionar sus diferencias mediante un
diálogo tranquilo, dejando atrás todas las tensiones.
CáncerCáncer
es un signo sensible e intuitivo que absorbe todas las emociones que
percibe de su entorno. Si se encuentra en un ambiente hostil se contagia
de esa vibración negativa; si el ámbito es relajado y optimista, se
dejará atrapar por las ondas positivas.
Si se enoja por poca
cosa, habrá que esperar un poco a que se le pase o conquistarlo
nuevamente a partir de un abrazo, una sonrisa, una mirada. Más que las
palabras, para Cáncer estos pequeños gestos son mucho más
reconciliadores. De todas formas no olvides que son muy perceptivos y te
perdonarán fácilmente si tus intenciones son sinceras y amorosas, de lo
contrario, percibirá la falsedad y el perdón ya no será tan sencillo.
Ahora
bien, si el enojo es grande, los cancerianos son imprevisibles. No por
nada son el signo que acapara el mayor número de asesinatos y crímenes
pasionales.
Por supuesto que, sólo unos pocos pierden el norte en
ese extremo, pero sirve para entender que pueden llegar a ser muy
violentos cuando se sienten heridos o cuando hieren a las personas que
ama.
En lo cotidiano es de enfadarse u ofenderse por sus
inseguridades. En estos casos, opta por alejarse del escenario del
conflicto para calmarse o para vengarse sutilmente.
Lo
aconsejable para volver a acercarte a Cáncer, es hacerlo con amor y
paciencia. Si llegas con violencia y agresividad, absorberá esta energía
y las cosas se pondrán peor. Bríndale seguridad demostrándole cuánto lo
quieres y el conflicto se apaciguará prontamente.
LeoMuchas
personas no pueden vivir sin pelear, enojarse o discutir, pero no es el
caso de Leo. A este signo no le gusta enfadarse, sino todo lo
contrario: Quiere disfrutar de la vida jugando y divirtiéndose, luciendo
su gran porte por el mundo.
Este signo tiene fama de vanidoso,
orgulloso, egocéntrico y lo es, pero no mucho más que cualquier persona.
La mayoría de las personas goza de los halagos y el reconocimiento solo
que Leo lo admite y demuestra más. No le gusta que lo dejen en
ridículo, ni que lo excluyan. ¿Y a quién le gusta eso? A Leo no, y te lo
explicará claramente: “No te pases conmigo, que yo valgo mucho”.
Leo
se molesta si le llevan la contra en temas que tiene bien claros, o
cuando lo traicionan en algún asunto profesional importante.
Su
enfado, como el de Tauro, es visible, físico y muy agresivo. Desata su
furia cuando se meten con quienes quiere, porque además, están hiriendo
su orgullo protector.
Los leoninos son nobles y atacan de frente
cuando sienten la amenaza directa. Son implacables pero no rencorosos…
para ellos sería darle excesiva importancia a quien se atrevió a
lastimarlo. Si te quiere, enseguida dejará atrás el dolor y los
errores pero mientras dure el enojo, te odiará y lo peor que puedes
hacer es hablarle. Necesita calmarse y eso le lleva más o menos un
tiempito. Aléjate hasta que se le pase para poder reconciliarte y salvar
tu vida.
VirgoVirgo
es un signo de predisposición nerviosa, que busca continuamente la
perfección y que se estresa con facilidad, sin embargo no es de
enojarse. Es capaz de enfadarse más consigo mismo que con los demás.
El
lógico y bueno de Virgo comprende a cada persona y entiende que cada
cual debe ocuparse de sus errores. Ahora bien, la falta de consideración
y respeto, el incumplimiento de la palabra o la falta de ética, le
hacen hervir la sangre.
Casi siempre controla sus emociones y
parece imperturbable o demasiado sereno ante el conflicto. No te lo
creas, la procesión va por dentro.
En pocas ocasiones, cuando la
furia lo supera, puede reaccionar sorpresivamente revoleando algo, o
pegándole fuertemente a la mesa.
Como ocurre con la mayoría de
los signos, es mejor dejarlo hasta que se le pase. Si la sigues, puedes
terminar deteriorando para siempre tu relación con ellos
Cuando
Virgo se aplaca, es el momento de explicarle el cómo y el porqué de lo
sucedido. No vayas a querer acercarte ofreciendo falsas disculpas.
Siempre tendrás que hacer las aclaraciones pertinentes y dar tus
razones.
Es posible que se desahogue contándole a alguien sus problemas, pero no se desquitará ni vengará jamás.
LibraLibra
es uno de los signos menos propensos a enojarse. Su gusto por las
buenas formas, la diplomacia y la armonía, no es compatible con los
conflictos y la violencia. Libra huye de todo eso. Sin embargo, es de
acercarse a ese tipo de situaciones cuando ejerce de mediador entre dos
partes enfrentadas, en la búsqueda de un equilibrio.
Libra siempre sonríe y se comporta de un modo apacible y encantador la mayor parte del tiempo.
Los
enojos o molestias ocasionales surgen cuando lo ignoran mientras habla
muy compenetrado de algún tema; cuando lo dejan mal parado injustamente;
cuando maltratan a un inocente.
No es de reaccionar con furia y
en plena efervescencia, se detiene a pensar si merece la pena enfadarse o
si puede arreglarlo de otra manera.
Ahora bien, si decide que
hay motivos, puede dejarse llevar por la emoción y actuar como un
energúmeno. Esta muestra de indignación o furia dura muy poco, pero si
consideran que no mereces perdón, olvídate de ellos.
EscorpioEscorpión es el signo del autocontrol: Es un gran actor ocultando cómo hierve de indignación.
Si
algún comentario no le gusta o si lo cree fuera de lugar, si se siente
celoso, presionará sus labios, mirará hacia otro lado y te ignorará con
un silencio sepulcral. Lo primero que hace es retirarse de la escena.
No pierde la calma sino el habla.
Es muy probable que los demás
no perciban su enojo hasta que les clave su aguijón. Es un error
esperar reacciones inmediatas y transparentes de este signo. Son muy
intuitivos, perciben el punto débil del oponente y saben cómo hacer
para vencerlo. No siempre son manejadores o manipuladores; sin embargo,
deben aprender cuándo detenerse, ya que no se conforman con ganar:
Quieren también destruir al enemigo. Pueden demorar años en perdonar y
olvidar.
SagitarioSagitario
no pasa mucho tiempo de su vida enfadado, pero cuando lo está, es de
temer. Es muy expresivo y el enojo se le ve en la cara. Acto seguido,
empuña el arco y ataca con su flecha sin importarle dónde pegue. Aunque
no quiere hacer tanto daño, pega donde más duele.
Sus
estallidos de furia son rápidos, intensos e inesperados y por lo
general, están relacionados a la falta de libertad de acción.
Cualquier
cosa que frustre sus planes, lo fastidia muchísimo y puede desatar su
ira. Lo mejor es que permanezcas en silencio, si no quieres que se ponga
más furioso todavía. Si no es para tanto, enseguida se le pasará y se
olvidará del asunto. Si la cosa fue grave, déjalo explotar sólo y cuando
baje un cambio, aclaras lo que haya quedado pendiente.
CapricornioPese
a su apariencia distante y misteriosa, Capricornio es un signo muy
sensible y se molesta muy fácilmente. Si se siente herido o enojado casi
no lo demostrará: es muy reservado y le gusta tener el control sobre
sus emociones.
Para que este signo reaccione con furia la
situación debe ser especialmente seria. Y, cuando le da rienda suelta a
su enojo, deja a todos asombrados, fuera de juego. Hay que dejarlo solo
para que no se enfade aún más.
Capricornio no quiere que nadie le
hable: No quiere explicaciones, ni disculpas, ni palabras afectuosas.
Dependiendo de la situación, podría calmarse si alguien le ayuda a ver
las cosas con sentido del humor, pero esto es muy arriesgado si no lo
conoces bien.
Capricornio es práctico y sabe serenarse sólo.
Leer, escuchar música, dar una caminata, le ayudan a liberarse de la
tensión negativa. Cuando se ha calmado, reflexiona sobre lo sucedido y
sin dejar que las emociones distorsionen los hechos, consigue que sea
más fácil aclararlo todo.
Ahora, si se siente demasiado dolido,
se esfuerza en no dedicarle más tiempo ni energía al otro. Es capaz de
guardar un profundo rencor y resentimiento, cargando de culpas y
castigando a la otra persona (alejan su cara cuando te acercas, te
aíslan y desprecian) esperando que te esfumes de su vida.
AcuarioAcuario
controla sus emociones, está acostumbrado a debatir con gente de
diferentes ideas y sabe manejarse en grupo. No es común verlo enojado y
cuando lo hace, tampoco es de perder la cordura.
Más que
enfurecerse, Acuario tiene broncas esporádicas: Da un portazo y se va, o
te dice algo cruel mientras se despide. Quédate en silencio porque
bastará con que digas algo para que te demuestre lo contrario. Es muy
impredecible. A pesar de su despego, acuario es muy sensible y no le
gustan nada las peleas. Cuando se enoja, necesita tiempo y espacio para
enfriarse.
Mientras dure su fastidio, es posible que no te
atienda al teléfono; no responda tu correo, ni te reciba cuando vayas a
aclarar las cosas en persona. Preferirá eso, a que le veas perder los
estribos. Si la pelea no fue para tanto, acuario mismo te buscará para
dialogar y esclarecer. Pero, si la disputa fue grave, simplemente,
olvídate de él.
PiscisPiscis
es el signo de la evasión: Cuando se siente invadido de problemas, se
desconecta y se pierde en un mundo mejor. Es afectuoso y dulce e intenta
seguir así en situaciones difíciles. Cuando se la ve venir, escapa al
menos, con su imaginación. Cuando el conflicto pasa a mayores y no
puede escabullirse, simplemente explota.
Los enojos de este signo
son muy violentos, de mucha bronca contenida y también inesperados,
porque te acostumbran a su sonrisa y no a reacciones tan bruscas.
Entonces, los piscianos pueden hacer los comentarios más hirientes que
te imagines, desparramar insultos y barbaridades, pueden darse la cabeza
contra la pared o revolearte con algo. Piscis, el signo más compasivo,
cuando está enojado puede ser el más desconsiderado.
Es
preferible que te mantengas alejado. Esa tempestad, no suele ser larga y
piscis pronto vuelve a su estado habitual para más tarde, poder hablar o
sencillamente, dejarlo así.