Corte en el mástil de Yerba Buena: una obra que complica y se demora

Miércoles 15 de Agosto de 2018, 08:46

EN ACCIÓN. Tres obreros aparecen en un sector de la obra del canal. LA GACETA / FOTOS DE FRANCO VERA.



El corte de tráfico en el corazón de Yerba Buena -la unión de las avenidas Aconquija y Solano Vera- durará un buen tiempo más.

Las rutas alternativas seguirán siendo la única posibilidad de circulación hasta fines de octubre, como mínimo. Esos son los tiempos que plantean los gobernantes. Y que -por ahora, dicen ellos- se encuentran dentro del plazo original de la obra de construcción del desagüe pluvial San Luis. No obstante ese orden en los vencimientos, el intendente yerbabuenense, el radical Mariano Campero, viajó el lunes a Buenos Aires. ¿Por qué? Los certificados de junio y de julio todavía no han sido librados a favor de Supercemento, la Unión Temporal de Empresas a la que se le adjudicó la tarea.

Campero se reunió con Sergio López, de la Unidad de Coordinación de Programas y Proyectos con Financiamiento Externo, que depende del Ministerio del Interior de la Nación. “Me garantizó que no hay ningún problema económico”, relató al finalizar esa conversación.

Según sus dichos, la irregularidad no se debe a inconvenientes presupuestarios (como él temía antes de ese encuentro), sino administrativos, pues la empresa solicitó unas modificaciones que deben ser aprobadas por los organismos internacionales de crédito. “La obra no se ha paralizado. Tampoco se ha quedado sin fondos. Y estamos dentro de los plazos”, reiteró.

Pese a esas declaraciones, esta situación ha provocado angustia en los comerciantes de la Solano Vera, quienes desde octubre del año pasado conviven (o sobreviven) con los cortes de tráfico en esa arteria.

“El panorama es desolador. Han cerrado 26 negocios. No se vende nada. A los clientes les resulta imposible acceder. Y cuando llueve es peor. Con la cantidad de barro, ni los propietarios pueden entrar”, dice Esteban Lamontanaro, presidente de la Cámara de Comerciantes yerbabuenense.

“Campero nos había dado su palabra de que iba a hacerse cargo de la situación. De que no iban a quedarse sin dinero. Y de que la Municipalidad nos acompañaría. Nada de eso ha sido cumplido”, añade.

En concreto, los comerciantes razonan que, si los pagos se atrasan, la obra también. Eso se traduce en sus locales vacíos por más tiempo del calculado. En el caso de Lamontanaro, por ejemplo, lleva conviviendo con el tráfico cortado más de un mes de lo estipulado.

Hace unas semanas, trasladaron su reclamo ante la Defensoría del Pueblo de la Provincia, con quejas ante el ombudsman, Fernando Juri Debo, sobre el accionar del Estado municipal.

La construcción del canal San Luis es una de las obras más grandes de infraestructura pluvial en ese municipio. Para el entubamiento, fue necesario demoler los pavimentos existentes en la Solano Vera, desde la Plaza Vieja hasta el cruce con la Aconquija, y levantar las platabandas de esta última trocha, desde El Mástil hasta la calle Uruguay.
 

Fuente: https://www.lagaceta.com.ar/nota/780509/actualidad/corte-mastil-yerba-buena-obra-demora-complica-preocupa.html