En la cárcel no paran las fiestas de la Madame colombiana

Miércoles 10 de Octubre de 2018, 08:48





Todos los 24 de septiembre la cárcel de San Diego en Cartagena, Colombia, se enciende en una fiesta. Es el día de la Virgen de las Mercedes, patrona de los reclusos. Este año la fiesta tenía un aditivo especial: la presencia de Carmen Campos Puello. La popular Madame, detenida el pasado 31 de julio, durante la Operación Vespa I se convirtió en la cabeza visible de la red de prostitución que azota Cartagena. Figuras como el cantante “Poncho” Zuleta y el ex futbolista Faustino Asprilla defendieron a la señora de 47 años y afirmaron que la rumba en La Heroica había terminado después de su captura.

La Madame promovió, en menos de un mes, el reinado más vistoso que se ha visto en la cárcel. Ella asesoró y vistió a las ocho candidatas, fue la jefe de ceremonias y se llevó el show bailando junto al cantante de salsa Eddy Jay, quien cantó sus canciones. Las reclusas se maquillaron de acuerdo a las indicaciones de La Madame quien hasta tuvo tiempo de enseñarles a caminar en pasarela.

Ese día no sólo declaró a los cuatro vientos que se siente feliz en la cárcel, recordando el infausto encierro que tuvo en Estados Unidos cuando cayó presa. Como si fuera una estrella Victor Hugo Arango, director de Distriseguridad de Cartagena, le pidió una selfie.

Casi un mes después la foto llegó a las manos del Fiscal General de la Nación Nestor Humberto Martínez Neira quien inmediatamente llamó al actual alcalde de la ciudad, Pedrito Pereira, para que le explicara la situación. En la foto también se ve al ex jurado de Yo me llamo y representante de artistas Jairo Martínez.


Nadie puede resistirse en Cartagena al encanto y poder de la Madame quien el 16 de octubre tendrá que rendir indagatoria y ha prometido revelar toda la verdad sobre políticos y personajes influyentes que visitaban sus casas. En la cárcel La Madame está lejos de vivir en un paraíso. Vive en una celda con otras tres reclusas más. Las temperaturas son altas y sofocantes al mediodía. Su trabajo allá es vender chitos y papitas fritas en paquete.

La Madame está deprimida. Debido a la detención de su mamá sus dos hijos fueron víctimas de matoneo. A ella no le tocó otra que sacarlos del curso donde estaban y esperar que el tiempo mitigue las aguas.

En la cárcel es respetada.  Una de las primeras ordenes que dio Paola Maldonado, la representante de las internas en la cárcel San Diego, apenas entró la mujer fue obligarle a la gente que no la llamara La Madame sino su verdadero nombre: Liliana Campos Puello.

Ella espera pacientemente el traslado a otra cárcel y no se pierde los tres noticieros diarios esperando saber cosas de ella. El escándalo con el director de Distriseguridad no le favorece, la furia que le despertó al Fiscal tampoco. Para La Madame su reinado sólo podrá seguir vigente en la cárcel.


Fuente: https://www.las2orillas.co/no-paran-las-fiestas-de-la-madame-en-la-carcel/