Es una modalidad que usan los ladrones para que los vehículos paren la marcha y así puedan robarlos.
Esta vez el ataque ocurrió en cuestión de minutos en el mismo lugar. Primero una camioneta, en la que viajaba una familia, recibió un golpe en el vidrio trasero. Afortunadamente, sólo se registraron daños materiales.
Sin tener móviles disponibles del 107 para asistirla, la niña fue llevada por su padre al hospital.