TRADICION. La fogata, la caminata sobre las brasas, los pedidos al santo; la tradición de la fiesta de San Juan se mantiene viva en algunos rincones de la provincia.
En un barrio tucumano mantienen viva la tradición de la fiesta de San Juan
Martes 25 de Junio de 2019, 07:01
Deseo, fe, esperanza, sacrificios, emoción, música y alegría. Esas son las cosas que se viven cada 24 de junio, en la Noche Mágica de San Juan. En un barrio alejado del centro tucumano, los creyentes se extendieron a lo largo de dos cuadras, en el pasaje Rosales 1.100, con una fogata en el medio de la calle, a la que rodearon para bailar y para ofrecer a modo de ritual. Desde las 20 y durante toda la madrugada disfrutaron de la música de artistas tucumanos que tocaron y cantaron y bailaron como ofrecimiento al santo.
Antes de la medianoche llegó el momento más esperado: la gente dejó los papeles con los deseos escritos y las cosas malas que desean sacar de sus vidas este año.
Colocaron los pedidos en la mochila que cargaba un muñeco de tela, hecho por los organizadores y a las 0 se lo quemó al grito de ¡Viva San Juan!
Para continuar con la tradición, saltaron tres veces la fogata; aunque algunos eligieron caminar por encima de las brasas como sacrificio. Cada año la fiesta se vuelve más popular y son más personas las que eligen disfrutar de una velada especial como lo es la de San Juan.