La venta ilegal de armas y municiones afecta a quienes cumplen las normas

Sábado 20 de Julio de 2019, 08:01

EN REGLA. Sólo pueden comprar y vender armas quienes cuentan con autorización legal. Y aún así hay un límite para la adquisición de municiones.



“Esta es una situación que nos perjudica a todo los que estamos en regla. Hay gente que se la rebusca de cualquier manera, pero todo tiene un límite”, se quejó Pedro Rodríguez, aficionado al tiro.

“No cualquiera puede tener arma y, mucho menos, comprar balas o cartuchos porque está limitada. Entonces, surgen estos tipos que alimentan el mercado negro. El drama es que a ellos no les importa a quién venden y esos productos terminan en manos de cualquiera”, explicó.

El aficionado planteó un rosario de quejas por este tema. “El problema es que, por estos tipos, los controles serán más duros todavía”, agregó. Rodríguez aseguró que los “armeros” utilizan los grises legales para llevar adelante con la actividad. “Un legítimo usuario puede comprar legalmente pólvora y fulminantes, pero por cierta cantidad. Junta a varios que hagan la transacción por ellos y tienen para comercializar miles y miles de balas y cartuchos”, explicó.

“El problema es que a la venta ilegal de armas en las redes sociales, se debe sumar ahora balas y cartuchos. La situación se está descontrolando porque esa ilegalidad genera más ilegalidad. Una persona que tiene un arma ‘fulera’, como no tiene papeles, terminará en manos de un hombre que las arregla clandestinamente. Y como no tiene cartilla de usuario, irá al mercado negro a buscar municiones”, concluyó Rodríguez.

R.S.C. es un estudiante universitario que paga sus estudios comercializando artículos de pesca, camping y armas de aire comprimido, que son de venta libre, se mostró sorprendido por las consultas de posibles clientes. “Primero te preguntan sobre las características de las armas que comercializo. Cuando se enteran de qué se trata, empiezan a preguntar si no les puedo conseguir una fulera porque necesitan una para defenderse”, comentó.

“Es una situación terrible -agregó- porque cuando les explico a que no me dedico a eso y les comento que están haciendo algo ilegal, me insultan. Lo mismo sucede cuando te piden balas de todos los calibres”, concluyó.

Cuestión de costos

Los especialistas consultados confirmaron que se pueden conseguir pistolas desde $ 2.000 hasta $ 10.000, según el calibre y el estado, en las redes sociales. Por las armas largas, en cambio, la oferta es mucho más amplia. Van desde los $ 3.000 hasta los $ 30.000, aunque este sector es más exclusivo, ya que se tratan de elementos que son adquiridos por cazadores. “El problema es que muchas no tienen el mantenimiento adecuado y su uso es peligroso”, destacó Juan Cruzado, otro tirador.

Sobre la recarga de balas y cartuchos, en el mercado informal se las puede conseguir a hasta un 50% más barata que en los comercios habilitados. “Legalmente, se pueden conseguir la pólvora y los fulminantes. El drama son las vainas y los cartuchos. Normalmente, se las compra en grandes cantidades y, después de recargarlas, se las comercializan. El drama es que nunca se sabe en qué manos caen”, indicó Cruzado.

Sebastián, otro aficionado al tiro, dijo que desde hace mucho tiempo que hay personas que se dedican a esta actividad. “En los lugares donde se practica tiro, se juntan las vainas y los cartuchos para hacer recarga y se las lleva a estas personas”, concluyó.
 

Fuente: https://www.lagaceta.com.ar/nota/812873/actualidad/esta-gente-perjudica-todos-estamos-regla.html