Brasil: denunció la desaparición de su hijo y luego confesó que lo mató por jugar con su celular

Martes 07 de Julio de 2020, 17:35

El cuerpo del nene de 11 años apareció en una caja en el garage de una casa vecina.



A mitad de mayo Alexandra Dougokenski acudió a la Policía y denunció la desaparición de su hijo de 11 años en el municipio brasileño de Planalto.

Las autoridades hallaron diez días después el cuerpo sin vida del menor en una gran caja de cartón en el garaje de una casa cercana.

Con la investigación en marcha, la mujer de 33 años se quebró y confesó que "ya no podía vivir con la mentira".

Sin embargo, primero contó que había administrado píldoras para dormir a su hijo y que la muerte fue causada por una sobredosis.

Más tarde, cuando los forenses detectaron los signos de asfixia en el cadáver, Dougokenski relató que, al despertarse por la madrugada, fue a la habitación del niño y lo encontró todavía despierto jugando con su teléfono celular.

En ese momento, la madre se enfureció, perdió el control y tomó una soga con la que estranguló a su hijo.

Según Dougokenski, cubrió la cabeza del nene con una bolsa y sacó el cuerpo de la habitación para ocultarlo.

"Rafael estaba agitado y se dormía a alrededor de las 3 de la mañana. No me detuve a pensar por qué hice eso", declaró la acusada, asegurando que actuó sola.

De acuerdo con el encargado de la investigación del Departamento de Homicidios, Eibert Moreira Neto, la acusada tiene un comportamiento perfeccionista y metódico, y esto (asociado con el hecho de que Rafael estaba entrando en la etapa de la adolescencia) causó que la madre perdiera el control, informó Diario Gaucho.

La mujer quedó detenida y acusada de asesinato intencional, además de entrega de información falsa a la Policía y ocultamiento de un cadáver, delitos por los que enfrenta hasta 30 años de prisión. /telefenoticias