9 de julio de 1816 en Tucumán: cómo contarles a los chicos la Independencia

Viernes 09 de Julio de 2021, 00:23

Héroes, intrigas y revoluciones, la historia de esta declaración realizada en Tucumán tiene todos los ingredientes para ser transmitida como un relato de aventuras para los más pequeños.



La Independencia argentina y el 9 de julio en Tucumán son temas del calendario escolar desde que los chicos inician la primaria, aunque también hay referencias a estas jornadas históricas en las primeras etapas del jardín de infantes.

A medida que van pasando de grado a esa misma historia se le agregan datos, detalles, fechas, nombres y un análisis cada vez más profundo de los hechos que acontecieron en aquellos años de fervor independentista.

Despertar la imaginación y el interés de los más chicos no es tan difícil con una historia así.

Primero, porque se oficializó y cuando eso sucede se convierte más en una obligación curricular que en un contenido que despierte un interés genuino.

Hace 205 años de la Declaración de la Independencia, aquí una forma de contar los eventos como un relato más entretenido.

Todo arrancó en 1810

Hace no mucho festejamos el 25 de Mayo en conmemoración del primer Gobierno Patrio en 1810.

En ese fecha, los criollos -así se llamaban las personas nacidas en la Argentina- decidieron que querían tener un gobierno propio y liberarse de España.

Ahí aparece la figura de uno de nuestros héroes, Manuel Belgrano, el creador de la bandera argentina y quien luchó por la libertad de nuestro país.

El "9 de Julio" tiene que ver con los criollos, con Belgrano y con nuestra Patria porque los criollos que habitaban en la Argentina, todavía no eran totalmente independientes sino que seguían siendo gobernados en parte por España.

Pasaron seis años y...

En 1816, en Tucumán, la provincia más chiquita de Argentina, los representantes de cada provincia decidieron reunirse allí para firmar un Acta donde declararían la Independencia y así ser libres para siempre del rey de España.

Tuvieron que viajar muchísimo para llegar a Tucumán, superar peligros y todo tipo de problemas.

Iban a caballo, en diligencias, en carruajes por caminos muy difíciles en medio del frío y muchas veces con hambre.

Pero todo se justificaba porque iban hacer algo importante por su pueblo: liberarlo  por fin de España.

En Tucumán todo el pueblo los estaba esperando.

Prepararon la casa más grande de la ciudad, que era la casa de la señora Francisca Bazán de Laguna.

Casa Histórica de Tucumán donde se declaró la independencia fotografiada en 1869.
Casa Histórica de Tucumán donde se declaró la independencia fotografiada en 1869.

Los congresales trabajaron durante varios meses, discutiendo, proponiendo proyectos y conversando, y al fin se pusieron de acuerdo.

Llegó el gran día

El Congreso de Tucumán (así se llamó a la reunión de los representantes en la casa de doña Francisca) comenzó el 24 de marzo de 1816.

El 9 de julio se confeccionó un Acta de la Independencia.

El secretario Juan José Paso le preguntó a los congresales de cada provincia si querían ser libres e independientes de España.

Todos a la vez contestaron con un grito: "¡¡¡Sí queremos!!!!". cada uno de ellos firmó el Acta que luego enviaron al rey de España para que supiera lo que había sucedido en Tucumán.

Un país feliz y libre

El pueblo festejó, hubo baile en las calles. todos gritaban: ¡Viva la Independencia! ¡Viva la libertad!

El 25 de julio hubo un desfile de cinco mil milicianos, encabezados por el General Belgrano.

Argentina por fin era un país libre y soberano.