“Matame, no sé qué hice”, dijo el santiagueño que asesinó a puñaladas a su hijo de 3 años

Jueves 03 de Diciembre de 2020, 05:45

El homicida le reveló el ataque a su hermano, que estaba en la misma casa. Luego, se provocó cortes con un cuchillo.



El brutal asesinato sigue conmoviendo y horrorizando a todo Santiago del Estero, en especial, a los vecinos del barrio Autonomía.

Un hombre mató de 12 puñaladas a su hijo de 3 años mientras estaba durmiendo. Luego del crimen, Germán Torres Murad, de 35 años, conocido en el barrio como “Barnie”, se dirigió a la habitación de su hermano, ensangrentado y a los gritos, lo despertó: “Vení a ver qué he hecho, matame porque no sé qué hice”, decía mientras intentaba entregarle el cuchillo.

“Mirá lo que pasó”, le dijo el homicida mostrándole a Samir, su hijo muerto.

Y en medio de la horrorosa escena, Germán tomó otro cuchillo de la cocina y se realizó múltiples cortes en diversas partes del cuerpo, y logró perforarse un pulmón, con intenciones de ponerle fin a su vida.

El hermano del Germán intentó salvarle la vida a Samir, y cuando comprobó que el nene no tenía signos vitales, llamó a la Policía. El asesino fue detenido y trasladado al hospital Regional con custodia policial, donde fue operado y quedó internado en observaciones.

¿Qué fue lo que pasó ese día antes del crimen? Según las primeras averiguaciones, la noche para la familia Torres había sido complicada. Habían fumigado la casa por una invasión de hormigas y no pudieron irse a dormir hasta las 6 de la mañana. Allí vivía Germán junto a su hermano y su madre y desde hace un tiempo, también su hijo Samir.

Germán y Marta (madre de Samir) habían discutido. Según testigos, fue un cruce de palabras como otros que habían tenido recientemente por problemas en la pareja. La mujer intentaba irse a vivir a otro lado con sus hijos. Por lo que Germán se mostraba molesto y manifestaba su desacuerdo.

La mañana del martes la casa estaba en silencio, todos los familiares dormían: Samir, su tío Fernando Ariel Torres Murad y su abuela, Margarita Murad. Germán estaba despierto y en la cocina, dicen que preparando en almuerzo. No se sabe qué fue lo que desencadenó el trágico desenlace pero fue entonces que el hombre tomó un cuchillo, se dirigió a la habitación y apuñaló 12 veces a su hijito dormido en distintas partes del cuerpo. Samir murió en el acto.

El nene vivía en la casa del padre desde hacía 18 meses. Solía dormir con su abuela paterna, quien “le brindaba amor incondicional”, al igual que sus tíos paternos.

Algunos allegados al asesino dicen que desde hacía un tiempo veían que el hombre estaba "como depresivo" pero que era muy bueno con su hijo, “que siempre lo cuidaba y trataba de educarlo con mucho respeto”. Otros, en cambio, indicaron que Germán era violento con el niño a quien consideraba “muy inquieto” y por ello recibía golpizas.

Además, según la información recolectada por los investigadores, el imputado es adicto a las sustancias tóxicas y sin bien en la casa no hallaron ningún tipo de droga, sospechan que podría haber tenido un brote psicótico, producto de la desmedida ingesta.

“¿Por qué hiciste esto, por qué a Samir?”
El llanto desgarrador de los hermanos de Samir Torres sacudió a los vecinos del barrio Autonomía. Bronca, dolor e impotencia al encontrar el cuerpo del niño asesinado a cuchilladas en la habitación de su padre.

Marta, su mamá, era contenida por policías y sus allegados, mientras trataba de encontrar una explicación a lo que había pasado. Era su hijo, el menor de los tres que tenía. “¿Por qué hiciste esto; por qué a Samir? Hijo de p… por qué lo mataste así”, repetía constantemente la mujer, mientras lloraba a gritos, al mismo tiempo que la Policía y la Fiscalía realizaban los procedimientos pertinentes en la vivienda donde se produjo el grave ataque.

Además del cadáver del pequeño Samir, los investigadores encontraron en una de las paredes de la habitación una frase que decía “perdonen, los amo”. Aparentemente lo había escrito Germán con la sangre de su hijo.


Los expertos realizaron extracciones de la sangre para ser cotejada. Una de las sospechas de los investigadores sostiene que el menor podría haber sido atacado de un certero cuchillazo mientras dormía, ya que nadie lo escuchó gritar.

El acusado está imputado por el delito de homicidio doblemente calificado por el vínculo y alevosía. La Fiscalía solicitó además que se le practicaran análisis toxicológico y pericias psiquiátricas. /Clarín