Dejaron Argentina por la inseguridad y se fueron a EEUU: ahora son un éxito vendiendo churros con dulce de leche

Domingo 07 de Marzo de 2021, 21:13

La familia Miotti vivía en San Martín y en 2018 decidieron dejar el país por temor a los asaltos. Tienen dos foodtrucks y recorren el sur de Florida.



Cuando Néstor y Noelia Miotti decidieron mudarse a Estados Unidos, en el sur de Florida, pensaban en abrir nuevos caminos en sus vidas y buscar un futuro distinto para sus hijos. Fue en 2018, y los impulsaba la inseguridad que sentían en San Martín, Buenos Aires, donde siguen teniendo amigos, familia y seres queridos que impiden cortar del todo el sentido de pertenencia.

Pero su viaje terminó llevándolos a fundar un proyecto que los convertiría en los Willy Wonka "argentos" de Estados Unidos. Tras intentos fallidos de emprendimientos de venta de postres latinoamericanos, fundaron una fábrica de churros gourmet que hoy es furor.

Apenas se mudaron decidieron instalar un proyecto de cocina de postres tradicionales latinos. "Hacíamos cinco variedades de flan, dos tipos de tortas, pan de queso y churros congelados", cuenta Néstor, padre de Santino (15), Renata (4) y Delfina (2). Lograron insertarlos en restaurantes, supermercados y gasolineras, pero no estaban dando el resultado que ellos esperaban.?

Foodtruck en pandemia. Respetando el distanciamiento social, los clientes se acercan al automóvil a comprar los churros.

“No sé cuánto vendía porque fue muy duro, la competencia que había era muy fuerte. Vos tenes un mercado latino muy grande, por eso hay mucha variedad de productos y empresas que los fabrican. Mi producto era de calidad, usaba ingredientes de primera línea, pero después venía una empresa mucho más grande con un costo menor y te lo vendía más barato. La competencia tan fuerte del grande que come al chico era el primer impedimento para arrancar acá”, relata.

A fines de 2019, justo antes de la pandemia, decidieron parar la pelota y pensar cómo seguir. Una idea empezó a rondarles con fuerza. “Si vendo a las distribuidoras churros congelados, ¿por qué no los hago yo?", cuenta Néstor que pensó. "Tener un local propio con una marca, crearlo de una forma no tan clásica de lo que uno está acostumbrado a ver, reinventarlo y hacerlo más gourmet, divertido y familiar”, fueron las premisas de ese sueño. Y así nació Churros World CO.

En mayo de 2020, la entrada a bares y restaurantes se prohibió, entonces la familia planteó el “concepto de foodtruck” para vender al aire libre, en espacios públicos: donde más había gente. 

Apostando todo al primer proyecto. La fábrica dónde se cocinaban los postres latinos, que después de un año, no terminó dando el éxito esperado.

Hoy venden unos 20 mil churros por mes sólo en la sede central, ya que sumaron un segundo foodtruck. Algunos artistas reconocidos probaron sus creaciones, como el cantante de rap Flo Rida, y la actriz argentina Andrea Estévez.

Entre las variedades que ofrecen tienen churros bañados en chocolate, dulce de leche o mermeladas similares a las que van en las clásicas donas estadounidenses. Sus productos vienen en bandejitas con la bandera norteamericana, transmitiendo la idea de que los clientes pueden sentirse parte de la identidad del manjar frito y relleno. Incluso cuentan con churros con malvaviscos, apuntando a un mix de culturas.

"Me gusta lo que hago, encontré una pasión. Quiero estar ahí y ayudar, estar con la gente, comentar de qué se trata el proyecto. Hay personas que no saben qué es un churro, sobre todo el público ’gringo’. Entonces les explico, les regalo alguno, y después vuelven y recomiendan", dice Néstor.

Los foodtrucks de Churros World CO tienen puntos fijos donde atienden: “como restaurantes con ruedas”, dice Néstor. A veces también cubren eventos privados y se trasladan. “Tratamos de no descuidar del cliente que casi todos los días y compra el churro, como uno en Argentina va a la panadería y compra el pan y las facturas”, compara.

Su idea es expandirse por todo el Sur de Florida y llegar, en un futuro a América del Sur. “No nos olvidamos que nosotros somos argentinos y nos gustaría que puedan probar nuestros productos en nuestra tierra”, dice recordando su querido barrio de San Martín.

“Hicimos todo por nuestros hijos. Creo que es la razón principal”, concluye Néstor. Aunque ahora, la pasión por sus churros es cada vez más fuerte. /Clarín