Indignación contra un príncipe que mató al oso más grande de Europa

Viernes 07 de Mayo de 2021, 07:13

Arthur era un oso pardo de 17 años de edad que, según grupos animalistas, fue ultimado por el príncipe Emanuel del microestado europeo de Liechtenstein.



Un príncipe de Liechtenstein mató al oso pardo “más grande” de Rumania durante una cacería, lamentaron dos Organizaciones No Gubernamentales (ONG), un caso que investiga la policía de protección de la naturaleza rumana.

”Arthur tenía 17 años y era el oso más grande observado en Rumania y sin duda en la Unión Europea”, indicó en un comunicado Gabriel Paun, de la ONG rumana Agent Green, que evoca el testimonio de un guarda forestal de la región de Covasna (centro). En el comunicado, publicado en la página web de la ONG se publicaron diversas fotos del oso, entre ellas, una donde se observa al animal abatido.

Agent Green añade que los osos pardos son una especie protegida por la legislación de la Unión Europea y el Convenio de Berna, que protege la conservación de la flora y de la fauna silvestres, y de sus hábitats naturales, así como proteger las especies migratorias amenazadas de extinción.

Rumanía prohíbe la caza de osos, pero, según la ONG y el grupo de defensa de los animales VGT, el príncipe, que vive en Viena y aparece identificado como Manuel, se benefició de un permiso para matar a una hembra sospechosa de atacar varias granjas el año pasado.

El ministro de Medio Ambiente rumano, Tanczos Barna, confirmó en los medios locales la concesión del permiso, pero sin revelar la identidad del beneficiario. El príncipe mató en marzo “un macho que vivía en el corazón del bosque y nunca se acercó a las casas de los alrededores”, aseguró Paun, citando un documento de la asociación local de cazadores a nombre de “Emanuel Prinz von und zu Liechtenstein”.

”Es evidente que el príncipe no vino a resolver un problema que afecta a los aldeanos, sino a matar un oso y llevarse el trofeo más grande para colgarlo en la pared”, lamentó el activista. Las autoridades no confirmaron la identidad del cazador. ”Nosotros sabíamos que debía matarse a una osa, pero nos hemos encontrado con un macho”, explicó el responsable de la policía de protección de la naturaleza, Octavian Bercean, al justificar la investigación.

La casa real de Liechtenstein, un microestado centroeuropeo, rechazó comentar “un asunto privado y personal, cuyo contexto desconoce”, aunque expresó su apego al “respeto de la naturaleza”.

Rumania alberga unos 6000 osos pardos, la población más importante de Europa. En los últimos años, aumentaron los conflictos por su presencia, que se considera invasiva. Una parte de la población y de los políticos quieren que se levante la prohibición de cazarlos, pero los defensores del medio ambiente piden mejorar su coexistencia con las personas en las zonas rurales. /La Nación