Cómo vivió en la clandestinidad y por qué cayó el acusado de matar a Mariotti
Viernes 14 de Mayo de 2021, 08:54
Eso es lo que los investigadores del crimen de Pablo Mariotti creen que le pasó a Lucas Gordillo, el principal sospechoso de la muerte del joven cuyo cuerpo fuera encontrado sepultado en cal en el patio e su casa el 22 de febrero de 2019.
Las evidences suponen que ya por entonces Gordillo, quien habría sido el que convenció a Pablo de que usara la herencia que le dejaron para prestar dinero, decidió incursionar en el tráfico de drogas. algunas fotos en sus redes sociales refuerzan esa hipótesis.
La hipótesis que maneja la fiscal Mariana Rivadeneira es que Gordillo perdió una carga de estupefacientes. Ese es el error que suele costar caro. Urgido por reponerla, el sujeto urdió el plan que incluía asesinar a su amigo de la infancia y tratar de ocultar su cuerpo, para simular un repentino viaje.
Involucró en ello a todos sus allegados. Solange Manzaraz Beltramino (ex pareja del ahora detenido), Alexis Yamil Salis, Jesús Rolando Morán, José Miguel Escudero y Ramón Osvaldo Manrique. Todos ellos quedaron detenidos mientras Gordillo escapaba.
Lucas Gordillo
Su paso por la clandestinidad duró 15 meses. Se cree que la primera escala fue Jujuy, donde estuvo unos días hasta que pudo cruzar a Bolivia. Allí, con el dinero del que se habría apoderado tras asesinar a su dueño, comenzó a tejer las redes de un nuevo negocio.
En realidad se piensa que era más de lo mismo. Narcotráfico, camuflado detrás del negocio también clandestino pero desde siempre tolerado del contrabando de ropa. Eso le permitió generar el dinero necesario para pagar los silencios que lo mantuvieron oculto a la vista de todos.
Porque aunque era prófugo de un crimen resonante, Gordillo solía visitar de manera asidua la zona de la vieja terminal de ómnibus, que fue donde finalmente fue detenido, se cree que por la delación de alguno de los nuevos enemigos que hizo en su actividad.
Ahora, tras negarse a declarar, el señalado por uno de sus cómplices como ideólogo y autor del crimen de Mariotti pasará un buen tiempo en la cárcel de Villa Urquiza, hasta tanto se sustancie el juicio en el que se lo acusará de ultimar a su amigo de toda la vida.
Su paso por la clandestinidad duró 15 meses. Se cree que la primera escala fue Jujuy, donde estuvo unos días hasta que pudo cruzar a Bolivia. Allí, con el dinero del que se habría apoderado tras asesinar a su dueño, comenzó a tejer las redes de un nuevo negocio.
En realidad se piensa que era más de lo mismo. Narcotráfico, camuflado detrás del negocio también clandestino pero desde siempre tolerado del contrabando de ropa. Eso le permitió generar el dinero necesario para pagar los silencios que lo mantuvieron oculto a la vista de todos.
Porque aunque era prófugo de un crimen resonante, Gordillo solía visitar de manera asidua la zona de la vieja terminal de ómnibus, que fue donde finalmente fue detenido, se cree que por la delación de alguno de los nuevos enemigos que hizo en su actividad.
Ahora, tras negarse a declarar, el señalado por uno de sus cómplices como ideólogo y autor del crimen de Mariotti pasará un buen tiempo en la cárcel de Villa Urquiza, hasta tanto se sustancie el juicio en el que se lo acusará de ultimar a su amigo de toda la vida.
Pablo Mariotti
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