Argentina es furor en Nueva York con cajero automático de obras de arte

Domingo 16 de Mayo de 2021, 13:09

La argentina que es furor en Nueva York con su obra de arte (Foto: Gentileza Barro Arte Contemporáneo)



Frieze Nueva York 2021 marcó el regreso de las ferias de arte presenciales desde que empezó la pandemia por coronavirus. Representada por la galería porteña Barro, la artista argentina Agustina Woodgate causó furor con su obra: un cajero automático que ofrece un dólar a cambio de depositar 100. Woodgate “hackeó” un ATM (las siglas en inglés de Automated Teller Machine) y lo convirtió en un ADM (Automated Dealer Machine), llevando al extremo la automatización de las transacciones de obras de arte. Con su pieza, expuso el rol de las operaciones presenciales que quedaron en stand by por la virtualidad pandémica y volvió a poner en el centro del debate la función de los galeristas e intermediarios.

¿Cómo funciona la ADM? El público inserta su tarjeta de débito y adquiere directamente la obra de la máquina. El cajero retiene 100 dólares y expende un billete de un dólar lijado. Luego, la operación termina en el desk montado por la galería, que entrega un certificado de autenticidad por 1900 dólares. El certificado termina saliendo más caro que el propio papel moneda. Porque, sin el documento que lo certifique, sin el contrato, eso es solo un billete lijado.

Cada dólar lijado conserva su número de serie. Que coincide con el que figura en el certificado de autenticidad. El billete se coloca en un taco de acrílico, dentro de una caja y se entrega el producto terminado.

El proyecto “Don’t Trust. Verify” toma su título del eslogan de Bitcoin, la criptomoneda más conocida. Mientras el mundo del arte lidia con la repentina locura por los NFT, donde las imágenes digitales se acuñan como tokens no fungibles y se venden en Blockchain (cadenas de bloques), a veces por cientos de miles o millones de dólares. La presentación de Woodgate sirve como un recordatorio de que todas las monedas tienen valores arbitrarios en la sociedad.

La artista argentina Agustina Woodgate es furor en la feria Frieze, en Nueva York con su obra "Don’t Trust. Verify" que deconstruye el dinero como medio de representación. (Foto: Barro Arte Contemporáneo)


Woodgate nació en Buenos Aires en 1981. Su práctica artística se centra en el estudio de los sistemas, las teorías de valor, las relaciones y las lógicas de poder que operan en la sociedad. Traza nuevas cartografías disolviendo los límites políticos que ordenan los paradigmas, unifica lenguajes visitando comunidades desplazadas, materializa y evidencia las relaciones de poder que rigen en nuestra sociedad y denuncia formas de dominación a través de sus obras. Lija mapas y billetes, dibuja rayuelas, le da voz a los más silenciados y fuentes de trabajo a los desempleados, crea obras a partir del descarte y deconstruye los grandes paradigmas.

Desde Amsterdam, donde vive, Agustina dialogó con TN.com.ar.

- ¿Cuál es el espíritu de la Automated Dealer Machine y cómo surgió la idea?

El Automated Dealer Machine (ADM) es un cajero automático reprogramado en una escultura digital operativa. Cargado con una pila de billetes de dólar estadounidense erosionados con los retratos y paisajes lijados en ambos lados y el número de serie siendo único rastro visible, ADM invita al cliente a retirar la obra directamente con su tarjeta bancaria. La instalación se convierte en un espacio de autoservicio y comodidad. El cajero automático automatizó el banquero ADM automatiza al galerista.

Los cajeros automáticos, tuvieron una profunda influencia no solo en la industria financiera, sino también en las tecnologías de seguridad y verificación. Su introducción fue un momento crucial en el que la automatización desplazó casi por completo un rol previamente humano mediante la introducción de una máquina ubicua. El cajero automático finalmente reveló que la banca no se trata de movimiento de dinero sino que de procesamientos de información.

- ¿De qué se trata la performance “Don’t Trust. Verify”?

El cliente se acerca al ADM, inserta su tarjeta de débito, su pin y sigue las instrucciones de extracción. El cajero solo permite retirar 100 dólares y a cambio dispensa un billete de 1 dólar lijado. Luego la pantalla informa que este papel aún no es una obra de arte sin el certificado de autenticidad. Entonces el cliente debe acercarse a la recepción para abonar $1900 por este certificado. Sin este certificado ese papel, es simplemente un billete lijado.

Don’t Trust. Verify (No confíes. Verifica) es una frase adaptada por el mundo cripto. Viene de una frase Trust but Verify (confía pero verifica) que uso Ronald Reagan al discutir las relaciones de los Estados Unidos con la Unión Soviética.

Con la tecnología de blockchain que usan las criptomonedas todas las transacciones pueden ser verificadas por los participantes de la red, no es necesario un tercero de confianza. Es por eso que a Bitcoin se lo llama un sistema sin confianza. Blockchain no elimina la confianza, sino que distribuye la confianza en toda la red para que se pueda validar la integridad de todas las transacciones.

Woodgate nació en Buenos Aires en 1981. Su práctica artística se centra en el estudio de los sistemas, las teorías de valor, las relaciones y las lógicas de poder que operan en la sociedad. (Foto: Barro Arte Contemporáneo)


- La crítica al uso del dinero como herramienta de distribución está en el centro de tu obra: ¿cuál es el futuro de las transacciones y qué perspectiva pueden aportar los NFT y las criptomonedas?

El futuro de las transacciones es “peer to peer”, sin la necesidad de contar con el servicio de terceros pero aún hay serios desafíos ambientales a resolver. Las criptomonedas se presentan como una amenaza a los bancos centrales ya que son monedas descentralizadas.

Los NFTs nada tienen que ver con sistemas transaccionales. Sino que más bien son un sistema para registro y venta de copyrights. El NFT no tiene como función reemplazar al dólar, las criptomonedas sí.

- ¿Es posible crear un nuevo sistema de valores?

Desde un punto de vista más filosófico, creo que cada persona tiene su propio sistema de valores. En cuanto a una perspectiva económica, el sistema de valores contemporáneo presenta un consumismo capitalista extremo en un horizonte de tiempo corto: Comprar, vender y gastar rápido para evitar inflación, donde ahorrar es casi imposible. Las criptomonedas proponen un sistema de valores nuevo que promueve el ahorro y el pensar a largo plazo. Esto provoca que las formas de consumo se modifiquen, evitando el consumo agresivo. Si sanamos nuestra relación con nuestro sistema de valores, sanamos al mundo.

- ¿Cómo crees que el arte puede incidir en el mundo pospandemia?

El arte tiene la capacidad de traducir sistemas y conceptos complejos. Yo lo tomo como un periodismo visual basado en investigaciones experimentales y multidisciplinarias que permite la libertad de cruzar información y experiencia de distintos campos y hacer asociaciones no convencionales que suelen revelar sutilezas fundamentales para nuestra sociedad. Creo que el arte tiene mucho más poder como medio de comunicación, que como función decorativa o de espectáculo.

Una máquina cuenta billetes que contiene 14 billetes de 10 pesos argentinos lijados ($140) y una balanza que, en un lado sostiene una moneda de un dólar estadounidense y en el otro lado el polvo de esos 140 pesos lijados. (Foto: Gentileza Barro Arte Contemporáneo)


- ¿Qué despertó tu interés sobre los sistemas de distribución?

Mi práctica intenta desglosar sistemas y mecanismos de distribución, no solo de dinero, sino que de recursos en general. En trabajos anteriores he realizado instalaciones donde el diseño de la infraestructura urbana es revelada y se deja en evidencia la organización implícita del territorio, los recursos y la sociedad. En el caso de las instalaciones The Source, en Art Basel; y Común y Corriente, en Barro, el sistema de distribución de agua pública es el centro de la cuestión, dejando a la vista las cañerías que trasladan este recurso nacional hacia las bocas de unos bebederos escultóricos que ofrecen agua filtrada en sitios donde este recurso es limitado y/o regulado. En el caso de National Times, presentado en La Whitney Biennial, lo que se exhibe es la infraestructura eléctrica y jerárquica de un sistema en red centralizado. Una red conformada por un reloj maestro que regula y sincroniza 40 relojes esclavos, mientras que estos últimos se autolijan haciendo desaparecer los números en sus caras a medida que el tiempo pasa.

Me interesa investigar los sistemas de distribución que nos regulan hoy, sus protocolos, diseños y consecuencias. Prototipar versiones diferentes de distribución, descentralizadas, automatizadas, colectivas y cooperativas.


Sobre Frieze, el presente y el futuro

Además de su ADM, la artista presentó en Frieze dos piezas que refieren al proceso inflacionario de nuestro país: una máquina cuenta billetes que contiene 14 billetes de 10 pesos argentinos lijados ($140) y una balanza que, en un lado sostiene una moneda de un dólar estadounidense y en el otro lado el polvo de esos 140 pesos lijados. Acompañaron la puesta cuatro pinturas hechas con la tinta que se desprendió del billete al momento de ser lijado.

Las obras de Woodgate trabajan sobre las formas en que la política y la poética institucional organizan el espacio público y privado, desde su infraestructura y su discurso de dominación. Utilizando un lenguaje lúdico, polisémico, minimalista y contundente, a través de obras escultóricas, intervenciones públicas e interacciones sociales, propone nuevos paisajes que interpelan al público y resignifican el sistema de relaciones existentes. Para ello convierte y reinserta el excedente de la sociedad en obras de arte que abren el camino hacia nuevas posibilidades de percepción y de acción.

La artista cuenta que ocupa gran parte de su tiempo en el proyecto Radioee.net (www.radioee.net) una radio online nómade y multilingüe: “Funciona como plataforma de investigación y de distribución donde las ondas radiales revelan la arquitectura del aire y ponen en tela de juicio el acceso a la información”.

En julio, inaugurará su taller en Buenos Aires. “Creo que indiscutiblemente afecta mi producción y mi enfoque. Me da mucha ilusión”, concluyó. /TN