Macabro: tras la bajante de un arroyo encontraron restos óseos y creen que se trata de un nene que se ahogó en 2015

Miércoles 28 de Julio de 2021, 09:14

El chiquito tenía 13 años cuando desapareció de la superficie de un banco de agua ubicado al norte de Santa Fe, mientras nadaba junto con otros familiares.



Un clima de misterio y conmoción se apoderó de la ciudad de Malabrigo, al norte de Santa Fe, cuando una mujer reportó este martes el hallazgo de restos óseos en las cercanías de un arroyo local, que pasa por el campo de un estanciero y es cercano a la ruta nacional 11.

La mujer que halló el cuerpo se llama Norma Noemí Pereyra, de 35 años, quien asegura que el cadáver pertenece a su hermano, Nahuel Yoris, un nene de 13 años quien se ahogó el 17 de enero de 2015 cuando nadaba junto al esposo de Pereyra, llamado Abel Lakner, quien también perdió la vida en es canal santafecino.

Norma contó a la Policía que ella había estado ese trágico día de enero en el río junto a Nahuel y junto a su esposo, mientras pasaban un día en familia, que terminó de la peor manera.

La familia había viajado en su Renault Clio color negro con vidrios polarizados, en donde engancharon un lancha hasta orillas del cauce. Allí soltaron amarra y navegaron aguas abajo hasta un banco de arena. En ese sitio Nahuel saltó al agua para nadar un rato, pero luego de un instante, el niño comenzó a ahogarse, por lo que Abel intentó rescatarlo. Sin embargo, ambos desaparecieron de la superficie.

Tras la denuncia por el hallazgo de los huesos, los uniformados se aprestaron al lugar e inmediatamente dieron con 18 fracciones de huesos que parecen ser humanos. Tras el peritaje, la Policía secuestró los huesos para que los forenses le realicen las pruebas de ADN correspondientes a la investigación.

Según explicaron desde la institución policial, fue la bajante del arroyo lo que permitió divisar los huesos tras casi seis años desde el momento en que la hermana de la víctima denunció la desaparición de Nahuel.

Quienes están a cargo de la realización de los exámenes de ADN correspondientes son los peritos del Grupo Técnico Criminalístico, supervisados por el Fiscal de turno Alejandro Rodríguez.

El día de la desaparición de Nahuel y de Abel, la Unidad Regional Novena de Malabrigo había publicado un comunicado en el que pedían a la población informar sobre cualquier dato que se tuviera de las dos víctimas. En esa jornada, cinco embarcaciones habían trabajado en el lugar hasta finalizar el día, sin localizar a ninguno de los desaparecidos. /Crónica