Modo ahorro: ¿cuál fue el trascendental cambio de vida que realizó Fulop con su canillita?

Lunes 20 de Septiembre de 2021, 12:25

La venezolana vive en un mega country, de los más caros de Buenos Aires, pero decidió cortar con algunos lujos también.



La mala nos llegó a todos. No hay dudas. Vivir en la Argentina se hizo muy cuesta arriba, sobre todo si los que toman las decisiones no piensan en la gente cercana y se siguen dando la buena vida en viajes y placeres ocultos mientras la pobreza redaccional se multiplica.

Lo llamativo, esta vez, es que es una estrella de primer nivel la que decidió pegar un volantazo en lo económico y reducir un gasto que hasta hace algunos años parecía minúsculo si se lo compara con sus propiedad y sus cuentas bancarias.

Se habla, claro, de Catherine Fulop, que por lo que cuentan algunas personas de su círculo íntimo entró en “modo ahorro”. Pero, ¿qué fue lo que hizo? Un pedido muy especial al canillita (repartidor de diarios para ser más claros) de su zona, en el barrio más caro de General Pacheco (no es Nordelta, señores, como dijeron los desinformados de siempre).

¿Y de qué se trata esta movida? De no gastar de más. Palabras más o palabras menos, esto sería lo que le habría pedido la buena de Catherine al muchacho que se mueve entre las mansiones que se encuentran entre una de las canchas de golf más lindas de Buenos Aires.

“No nos traigas más los diarios y las revistas. Te pido que las mires y si salimos nosotros o algo de mi familia ahí si te lo vamos a comprar”, le firmó mientras no podían creer la orden que recibían del otro lado.

El pedido, contaron desde esa empresa, se extiende a ella, Ova Sabatini, su hermana Gabriela, Oriana Sabatini y Paulo Dybala, quien se luce en la Juventus de Italia (¿podría realizar algún giro él no?) y está muy cerca de renovar su millonario contrato.

¿Creer o reventar? En eso se quedó pensando el muchacho al recibir la orden con el mejor tono venezolano para “ahorrarse” unos pesitos mientras los nuevos top se suben a aviones y deján atrás a sus golpeados empleados. ¡Hasta donde llegó la crisis, señores! /Paparazzi