Desde el entorno de Manzur señalan que las versiones sobre su retorno a Tucumán son “operaciones”

Lunes 24 de Enero de 2022, 09:39

Alberto Fernández y Juan Manzur



Tras varios días de rumores que hablaban de la pérdida de peso en el gabinete y de trascendidos que mencionaban incluso la posibilidad de dejar el Gobierno, el Jefe de Gabinete, Juan Manzur desmintió su salida de la gestión nacional. "La relación con el Presidente es excelente. Estoy enteramente dedicado a la gestión como Jefe de Gabinete del gobierno, coordinando y articulando el trabajo con los ministros y mañana como todos los lunes comienzo a la 7 de la mañana mis reuniones de trabajo", aseguró Manzur.

El futuro de Manzur estaba rodeado de incógnitas. Cuatro meses después de su entrada al gabinete, la figura del jefe de ministros perdió el brillo con el que llegó a Buenos Aires y el gobierno siguió atravesado por las pujas internas entre sus accionistas. Las versiones en torno a un regreso en el corto plazo a Tucumán se incrementaron con fuerza en las últimas semanas.

"Operaciones": así definieron en el entorno del funcionario ante la consulta a los trascendidos que este fin de semana dieron a Manzur con un pie afuera del Gobierno. Según confiaron fuentes oficiales, el funcionario de hecho habló con Alberto Fernández sobre las versiones.

"Él está bien, tranquilo, laburando. Mañana (por este lunes) nos va a hacer ir como todos los días a las 6.45", aseguraron. Lo cierto es que los madrugones del funcionario, que resaltaron en sus primeras semanas en funciones al frente de la Jefatura de Gabinete, ya no despiertan mayor interés.

Manzur sigue muy enfocado en su provincia: desde que asumió como jefe de ministros, recibió en reiteradas oportunidades en su despacho a Osvaldo Jaldo, el gobernador interino de Tucumán. La última vez, el pasado miércoles.

Es que la salida del funcionario de la provincia fue traumática en su relación con Jaldo.

Cuando desembarcó en la Casa Rosada tras la debacle electoral de las elecciones primarias que sumergió al Gobierno en una crisis interna sin precedentes, desde el oficialismo se lo presentó como una figura que llegaba para dotar de "volumen político" al gabinete.

Desde el entorno presidencial reconocen que su llegada al gabinete sí "oxigenó" en su momento al Gobierno en plena disputa interna entre el sector que se referencia en Fernández y el kirchnerismo y La Cámpora.

Pero en el último mes y medio, los mismos funcionarios que resaltaban esa virtud ahora aseguran que empezó a perder influencia puertas adentro.

El propio Fernández dejó en esta última semana un dato simbólico aunque confuso en términos políticos del rol que le asigna a su jefe de Gabinete.

Recluido en Olivos por ser contacto estrecho de una empleada que le sirve el desayuno todas las mañanas, el Presidente se encargó de exhibir en sus redes sociales una serie de reuniones de trabajo con sus principales colaboradores: Santiago Cafiero, Julio Vitobello, Gabriela Cerruti y Vilma Ibarra, en ese orden. La última foto con Manzur fue el 12 de enero.

Cuando asumió, el gobernador tucumano en licencia adoptó una mecánica de trabajo que le dio al Gobierno una impronta política que el funcionario intentó capitalizar: reuniones de gabinete al alba y la implementación de un tablero de control de la gestión para analizar la evolución de la marcha de cada ministerio.

Incluso se lo empezó a mencionar como un potencial candidato presidencial para el 2023, atado a la marcha de las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional que encabeza el ministro de Economía, Martín Guzmán.

En octubre, por caso, el jefe de ministros viajó a Nueva York para entrevistarse con acreedores y fondos de inversión con intereses en el país para apuntalar las conversaciones de Guzmán con el organismo. Una gira de la que no trascendieron demasiados detalles. /Clarín