Asesinaron al abuelo del futbolista de Talleres Ulises Ortegoza: el posteo del jugador entre el dolor y la bronca
Martes 05 de Diciembre de 2023, 16:55
Una discusión entre vecinos. Esa es la principal hipótesis que manejan los investigadores sobre el brutal crimen de Eduardo Sipper, cuyo cuerpo fue encontrado el domingo en su casa en San Nicolás, en el norte de la Provincia de Buenos Aires. El asesinato conmociona a esa localidad bonaerense, aunque el dolor también llegó a Córdoba: el hombre de 67 años es el abuelo de Ulises Ortegoza, futbolista de Talleres, que reclamó justicia.
A Sipper lo encontraron muerto en la habitación que alquilaba, cerca de las 14.30 del domingo, en la ciudad del norte de la Provincia de Buenos Aires. Lo halló la propietaria de la vivienda, que se asomó a una ventana y lo vio tendido en el piso, inconsciente.
Personal de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de San Nicolás cercioraron que la víctima había muerto a puñaladas, con heridas cortantes en el tórax. En el lugar secuestraron un cuchillo que sería el arma homicida.
De acuerdo a Diario El Norte, Por el caso hay un sospechoso de 25 años, que tenía llaves de algunas habitaciones y ahora se encuentra prófugo. Habría compartido comida y bebida con Sipper el sábado a la noche, antes de que estallara una discusión que desembocó en el crimen.
Interviene la UFI N°14 del fiscal Patricio Mugica Díaz.
Eduardo Sipper alquilaba una de las habitaciones de la vivienda en el barrio San Martín, en la zona norte de San Nicolás. “Vivía hace mucho acá”, dijo la propietaria de la casa, que también tiene inquilinos en otros dos cuartos. Uno de ellos, de 25 años, oriundo de Chaco y con antecedentes penales, es el principal sospechoso por el crimen.
El joven habría compartido comida y bebidas con Sipper el sábado a la noche. Pero la reunión derivó en una fuerte discusión. La mujer relató que durante la madrugada había escuchado a Sipper y su otro inquilino insultarse. Luego llegaron ruidos como de una pelea, que cesaron poco después. La mujer, dijo, no les dio mayor importancia.
Sin embargo, al no tener noticias de Eduardo ni del sospechoso, el domingo a la tarde se asomó a una ventana de la habitación. A las 14.30, encontró al hombre tendido en el suelo.
"Nunca pensé vivir una situación como esta pero me toca despedirte de esta vida. Pero en mi corazón vas hacer eterno, una gran persona, mi asador preferido. Vivimos tantas cosas juntos", se descargó Leo Ortegoza, otro de los nietos de la víctima.
Y concluyó su sentido mensaje: "Te juro que se va hacer justicia, mi nono. No merecías este final. Te amo, mi viejito. Que Dios te tenga en la gloria". /Clarín
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