Siguen buscando a los kayakistas desaparecidos en Pinamar y Claromecó

Miércoles 24 de Enero de 2024, 23:16

Son 10 días sin novedades de Ramón Román y Gabriel Raimann, quienes fueron vistos por última vez adentrándose al mar en Cariló. A Federico Saihueque, en tanto, le perdieron el rastro el domingo pasado



Con diferentes despliegues, siguen adelante los operativos de búsqueda de Ramón Román (56) y Gabriel Raimann (38), y Federico Saihueque Cuevas (25), quienes desaparecieron tras haber ingresado al mar en Pinamar y Claromecó, respectivamente. De los dos primeros nada se sabe desde hace 10 días, cuando fueron vistos pescando a la altura de Cariló. Al más joven, en tanto, lo buscan desde el domingo pasado. Los kayaks en los que navegaban fueron hallados a más de 30 kilómetros de la costa.


En el caso de Saihueque Cuevas, el guardacostas Río Paraguay continuó los rastrillajes durante toda la noche y en las primeras horas de la mañana de este miércoles se volvió a activar la búsqueda terrestre con la participación de la Policía Comunal, los Bomberos Voluntarios de Claromecó, la Dirección de Riesgos de la Policía Bonaerense y Defensa Civil de la Provincia, además de la Prefectura Naval Argentina.

El procedimiento incluyó un avión, motos de agua, un semirrígido y personal especializado. También se utilizaron drones para monitorear cuadrantes específicamente designados. La búsqueda se concentra en la zona del balneario Dunamar y del arroyo Claromecó. Hasta el momento solo se ha podido recuperar el kayak sin tripulante que, según confirmaron los investigadores, se trata del que había alquilado el joven en Puerto Mosquito para adentrarse al mar.

Federico vive en Tres Arroyos, es peluquero y también trabaja como empleado administrativo en una empresa de mensajería. Según comentaron desde su entorno, el domingo había viajado a Claromecó para pasar el día en compañía de una amiga. “Estaba iniciando la práctica no aficionado”, contó su familia a este medio sobre la experiencia que tiene para navegar en kayak.
 
El intendente de Claromecó, Pablo Garate, dijo que Federico había sido divisado el domingo pasadas las 19 en línea recta a la bajada de Dunamar, a unos nueve kilómetros de la costa.

Guardavidas del balneario lo contactaron para preguntarle si estaba bien. “El joven se identificó y les comentó que estaba entrenando y que en unos minutos salía. Esa fue la última circunstancia donde se lo pudo ver”, relató Garate. También reveló que no sabe nadar y que se subió al bote con una mochila y un salvavidas.

El bote en el que navegaba Federico fue hallado a más de 30 kilómetros de la costa

El operativo para hallar a Román y Raimann es de menor intensidad. Prefectura los busca con un semirrígido, moto de agua y guardacosta.

Las autoridades ya le comunicaron a los familiares que no esperan encontrarlos con vida. Esto provocó el repudio de los parientes de los desaparecidos, que lo expresaron a través de un comunicado en el que cuestionaron las decisiones que se tomaron en la búsqueda y reclamaron: “Exigimos a las autoridades que nos retribuyan todo el tiempo perdido y continúen con la investigación por todos los medios habidos y por haber”.

El bote en el que navegaban los amigos pescadores fue hallado el sábado pasado a la altura de Villa Gesell, a más de 30 kilómetros mar adentro. Más temprano ese mismo día, además, se había encontrado un flotador de color amarillo perteneciente al kayak. Fue localizado en la playa, también en Villa Gesell, a pocos kilómetros del Faro Querandí.

Este es el kayak en el que navegaban Ramón y Gabriel

Los familiares de Román continúan con la búsqueda de manera particular. Tras rastrillar por sus medios con avionetas, helicópteros y embarcaciones que contrataron, ahora recorren la costa desde la zona del Faro Querandí hasta Mar Chiquita.

Desde el domingo lo vienen haciendo con la colaboración de personas que aportaron camionetas 4x4, cuatriciclos, UTV y motos. En las redes sociales, los hijos de Román piden ayuda a quienes posean estos medios para seguir adelante con las recorridas.

Ramón es oriundo de Misiones y hace 26 años que vive en Pinamar. Trabaja en el rubro de la construcción y conoció a Gabriel el año pasado. Tiene poca experiencia de navegación, según revelaron los hijos.

Su amigo también es misionero, de la localidad de Campo Grande, padre de cinco hijos. Luego de un tiempo cumpliendo distintas labores en el mismo rubro, Raimann regresó a la Costa Atlántica hace unos días, con el deseo de radicarse definitivamente. En su caso, sus familiares contaron que no tiene conocimiento alguno sobre navegación./Infobae