La milanesa: Se prepara con carne vacuna de primera calidad, apanada con huevo y pan rallado. Lo que la hace especial es su grosor y su cocción perfecta, que la deja dorada por fuera y jugosa por dentro.
El pan: Se utiliza una especie de pan francés pero adaptado a la tucumana, fresco y crujiente, para absorber los jugos de la milanesa sin desmoronarse.
Los ingredientes: Tomate, lechuga y cebolla en rodajas finas, aportan frescura y sabor al sándwich.
La mayonesa: Es el aderezo clásico, aunque también se puede agregar mostaza, salsa criolla o chimichurri.
El tamaño: El sanguche de milanesa tucumano es abundante, capaz de saciar hasta el hambre más voraz. Cuenta con muchas capas de milangas.
La fama en todo el país
El sanguche de milanesa tucumano es famoso en todo el país por su sabor único y su contundencia. Se puede encontrar en restaurantes, bares, sangucherías y hasta en puestos callejeros de Tucumán. También se ha popularizado en otras provincias argentinas, donde se ha convertido en un favorito del público.
Un homenaje al sanguche de milanesa tucumano
En 2021, se inauguró en San Miguel de Tucumán un monumento al sanguche de milanesa, un homenaje a este ícono culinario.
El monumento, con forma de pan con una milanesa en el medio, es un punto de atracción turística y un lugar de encuentro para los amantes de este delicioso sándwich. /TN