Lunes 25 de Noviembre de 2024, 12:42
Pasaron tres semanas del Gran Premio de San Pablo, pero Franco Colapinto sigue rememorando vivencias. Muchas fueron hermosas, por sentir un clima futbolero en una carrera de Fórmula 1 con los miles de argentinos que se desplazaron para alentarlo en Brasil; otras más frustrantes, como los dos choques que sufrió durante el fin de semana; y hubo una muy triste, por la muerte de su abuelo paterno Leónidas. Este lunes, el piloto argentino reveló que se enteró la noticia a través de las redes sociales, en medio de un momento de desesperación, porque recibió muchos mensajes de condolencias y en un primer momento no sabía de quién se trataba.
"Está muy bueno todo el boom que se dio desde que subí con Williams a la F1.
En Brasil la gente era una locura, parecía una cancha de fútbol, no sabés el ruido que había. Es algo que yo no había visto nunca en el automovilismo y, creo, que no lo había visto nadie tampoco. Entonces es como una novedad. Y eso es gracias a los fanáticos argentinos que le meten tanta pasión, tanta garra", empezó recordando el nacido en Pilar, de 21 años.
Obviamente, la noticia de la muerte de su abuelo le cambió el semblante:
"No fue capaz el momento que esperaba, esperaba disfrutarlo más con la gente, pero no tuve un buen finde en lo personal, pero ojalá volvamos en el futuro, en 2026, 2027, andá a saber cuándo...".
Y, sobre ese tema puntual, recordó:
"Fue duro. Al final somos deportistas y nuestro trabajo es rendir bajo presión, en cualquier situación posible. El viernes me levanté y me habían mandado mensajes de condolencias y yo me puse re mal porque no sabía quién era. Me enteré por las redes, eran las 5 de la mañana, me levanté a hacer pis y me preguntaba ’¿qué pasó?rsquo;. Empecé a buscar en Twitter, Instagram y ahí leí que era mi abuelo, pero fue una situación muy fea. Dormí muy poco, la pasé mal".
De todas formas, Colapinto remarcó que ese fin de semana aprendió "un montón". "Cuando te va bien, cuando sumás puntos, cuando todo es color de rosa es cuando menos aprendés. Cuando te pasan cosas que no querías, que no esperás, y además de eso pasan cosas familiares y tenés que seguir rindiendo al máximo, aprendés.
La Fórmula 1 es un deporte de mucha presión, de riesgo, hay que estar 100 por 100 concentrado. Me voy acostumbrando a meterme en una burbuja para concentrarme en hacer lo que tengo que hacer, que es subirme a un auto y manejar rápido", aseguró.