Tras presentar la renuncia, el ex legislador Mellizo Orellana dijo que peleará por su inocencia

Viernes 16 de Mayo de 2025, 20:15

"Seguiré como formador de líderes y seguiré siendo peronista", declaró



Luego de más de 40 años en funciones públicas, el famaillense José Fernando Orellana dimitió este viernes a su banca como legislador. “Volveremos a empezar desde la misma política. Me sacarán el cargo de legislador, pero no nací con la banca en el hombro (sic). Me he forjado. No hace falta tener un cargo para hacer política, para ser un servidor. Seguiré como formador de líderes y seguiré siendo peronista”.

La Corte Suprema de la Nación dejó firme la condena contra Orellana por abuso sexual simple, con tres años de prisión en suspenso y la inhabilitación especial perpetua para ejercer cargos públicos. Antes de tener que llegar a ser expulsado de la Cámara para cumplir con la sentencia, el ex intendente presentó su renuncia dado que las instancias judiciales están agotadas. “Soy abogado y la renuncia es lo que corresponde. Si judicialmente no hay otra instancia, me puede doler, puedo considerar que es injusto, pero tengo que poner los pies sobre la tierra”, expresó.

Orellana tuvo 11 mandatos en la función pública, en cargos como diputado, intendente, legislador y concejal de Famaillá. Se mostró siempre como un dirigente independiente, que incluso llegó a desafiar al Poder Ejecutivo. Lo hizo durante la gobernación de José Alperovich y actualmente con la administración del gobernador Osvaldo Jaldo. Además, es uno de los referentes del Partido del Trabajo y la Equidad, fundado por el ex presidente Alberto Fernández.

“La vida es como una calesita: hoy estás arriba y mañana abajo”, dijo Orellana. Insistió con que hubo una operación política en su contra y remarcó que no hubo violencia ni abuso. “Si hubiese sido una persona del mal hubiera tenido muchas denuncias. Pelearé por mi inocencia”, aseguró y consideró que la condena no es proporcional, en alusión al impedimento perpetuo a ejercer cargos públicos.

El ex legislador agradeció la confianza de la ciudadanía, así como de su familia y de su compañera de vida, Sandra Mendoza. “Es una bocanada de aire”. De todos modos, dijo que en política las cosas no son como uno quiere.

“Esto es un tropezón, es un volver a comenzar. Me voy con la tranquilidad de saber que me voy por la puerta grande, con el cariño de la gente. De la política no me iré nunca, me iré solamente cuando no tenga vida. Nadie está exceptuado de problemas. El que no quiera problemas que vaya al cementerio, ahí está lleno de paz”, concluyó. /La Gaceta