El cambio histórico que hizo la conocida marca de ollas Essen después de 45 años de historia

Sábado 07 de Junio de 2025, 18:50

Después de 45 años, Essen —la reconocida empresa argentina de utensilios de cocina— da un giro innovador con el lanzamiento de la Línea Fusión, una nueva generación de cacerolas con cuerpo de acero inoxidable y núcleo de aluminio, el mejor aliado para distribuir el calor de forma pareja. Fabricada con tecnología Nova Stell, esta línea no solo representa una innovación para la industria, sino también un hito dentro de la propia historia de la compañía, que nació y creció fundiendo aluminio en Venado Tuerto, Santa Fe.

"Pero no va a reemplazar nuestras cacerolas Essen tradicionales, sino que son una nueva alternativa para quienes buscan practicidad sin resignar calidad", afirma Helga Yasci, actual directora e hija del fundador.

Essen nació en 1980 de la mano de Wilder Yasci, aunque sus raíces se remontan a 1954, cuando su padre, Armando Yasci, y su esposa Teresa Bompessi iniciaron Fundiciones Yasci en el patio de su casa. A fuerza de trabajo, inventiva y convicción, la familia transformó aquella fundición casera en un emporio de utensilios de cocina que hoy emplea a más de 420 personas de manera directa, fabrica 600.000 productos al año en una planta de más de 10.000 metros cuadrados en Venado Tuerto y exporta a cinco países: Uruguay, Paraguay, Bolivia, Perú y el más reciente, México.

Eso, claro, con el diario del lunes. Porque en los comienzos, muchos miraban con escepticismo esas cacerolas "feas, pesadas y caras" —como alguna vez las definió un consultor— que se alejaban del estándar estético de la época. Pero Wilder, inspirado por las reuniones de Tupperware a las que asistía su esposa, apostó por un modelo que terminó siendo revolucionario en el país: la venta directa. La primera demostración fue en Sancti Spíritu, un pequeño pueblo santafesino, donde vendió diez unidades.

Hoy, la compañía lleva más de 30 mllones de cacerolas vendidas y construyó una comunidad de más de 20.000 emprendedores en todo el país. Tanto mujeres como hombres, no solo comercializan los productos, sino que también encarnan la identidad de la marca. Gracias a ese trabajo colectivo, Essen está en camino de alcanzar este año el sello de Empresa B.

La nueva cacerola de 24 centímetros llega en un momento donde cocinar en casa vuelve a tener protagonismo como espacio de disfrute, experimentación y bienestar. "Entendemos que hay una cacerola para cada tipo de cocinero", apunta Labusta. "La Línea Fusión está pensada para quienes no quieren estar cuidando el antiadherente, que valoran la robustez del acero inoxidable y la eficiencia del aluminio en la conducción del calor".

El corazón de aluminio permite una distribución del calor pareja, lo que asegura las mismas funciones que los clásicos modelos de la marca: hervir, saltear, hornear, cocinar a baño maría o al vapor, freír y descongelar. Apta para todo tipo de cocinas —gas, eléctricas, vitrocerámicas e inducción—, conserva además la eficiencia energética que distingue a Essen: según un estudio del INTI, permite ahorrar hasta un 70% de gas.

Disponible a un precio cercano a los u$s300, esta nueva cacerola de acero inoxidable no viene a reemplazar a las tradicionales de aluminio, sino a convivir con ellas, ampliando la propuesta de la marca para distintos tipos de usuarios. Con un diseño minimalista y moderno, invita a cocinar sin apuros, a fuego lento y con confianza.

El espíritu de innovación no es nuevo en Essen. Este mismo año, su producto Flip Nuit, otro de sus productos estrella, fue distinguido con el prestigioso concurso Red Dot Design Award en Alemania, un reconocimiento internacional que solo dos marcas actuales de argentinas han obtenido hasta ahora: Essen y Peabody.

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