Otro rastrillaje fallido agranda el misterio sobre el paradero de Manuel Alberto Chucky Sárate

Sábado 14 de Junio de 2025, 07:36

SIN RESULTADOS. Policías y bomberos del sur tucumano realizaron otro rastrillaje con resultado negativo, tras los pasos del joven desaparecido a fines de febrero de este año.



A casi cuatro meses de la desaparición de Manuel Alberto “Chuky” Sárate, las autoridades provinciales realizaron este viernes 13 de junio un nuevo operativo de rastrillaje en la ciudad de Aguilares. La búsqueda, una de las más complejas del año en el sur tucumano, volvió a terminar sin novedades sobre el paradero del joven.

El procedimiento fue ordenado por la Unidad Fiscal de Delitos Complejos del Centro Judicial de Concepción y se extendió desde las primeras horas del día hasta las 15:00 en un terreno montoso de aproximadamente tres hectáreas. El lugar inspeccionado se encuentra al final de calle Larrea, en el cruce con el camino viejo a Monte Redondo, e incluye piletones de desagüe cloacal en desuso pertenecientes a la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT), lo que sumó dificultades a los equipos de búsqueda.

Durante la jornada, se realizaron recorridas minuciosas, allanamientos en sectores de difícil acceso y tareas de búsqueda en los piletones, en un esfuerzo por encontrar algún indicio que ayude a esclarecer el caso.

El operativo fue coordinado por la Jefatura de Zona 1 de la Unidad Regional Sur (URS), con apoyo de la Comisaría de Aguilares, personal de Defensa Civil, Bomberos, comisarías de Los Sarmientos y Alto Verde, móviles de distintas unidades, y efectivos de la Policía Federal Argentina pertenecientes al Cuartel del Aeropuerto Internacional de San Miguel de Tucumán.

La supervisión judicial estuvo a cargo del prosecretario Patricio Reynoso, mientras que en lo operativo encabezaron el despliegue el comisario principal Sergio Castro, jefe de la Comisaría de Aguilares; el comisario general Marcos Barros, jefe de la URS; el comisario mayor Gustavo Garzón, segundo jefe de la URS; y el comisario inspector Sergio González, jefe de Zona 1.

Al finalizar, el informe oficial fue categórico: “El rastrillaje concluye en su totalidad sin novedades”. Ningún objeto, señal o rastro permitió avanzar con la causa.

“Chuky” Sárate fue visto por última vez el 23 de febrero de este año. Su madre, Neli Soledad Sárate, radicó la denuncia formal el 25 de febrero y desde entonces ha estado presente en cada búsqueda. Acompaña de cerca los procedimientos, aún sin respuestas. “Parece que se lo ha tragado la tierra. No sabemos nada. Las pericias no dieron resultados y seguimos esperando”, declaró semanas atrás en medios locales.

La investigación comenzó bajo la órbita de la Unidad Fiscal de Usurpación, Estafa y Cibercriminalidad, pero fue luego derivada a Delitos Complejos debido a la multiplicidad de líneas de investigación que aún no descartan ninguna hipótesis.

Desde febrero, se realizaron allanamientos, relevamientos de cámaras, entrevistas testimoniales y búsquedas en basurales, cañaverales, caminos rurales y zonas descampadas entre Aguilares y Alto Verde. Sin embargo, los esfuerzos no han logrado acercar a los investigadores a una pista concreta.

Pese a los reiterados resultados negativos, la Policía aseguró que continuará con las tareas. La familia, por su parte, insiste en que no se detenga la búsqueda y exige que se profundicen todas las investigaciones posibles. “No vamos a parar hasta saber qué pasó con mi hijo”, reiteró su madre.

El caso de “Chuky” Sárate ya es uno de los más inquietantes del sur tucumano y pone en evidencia la dificultad de esclarecer desapariciones en territorios de geografía densa y contextos sociales complejos.