Lunes 16 de Junio de 2025, 18:45
Los bares emblemáticos del parque 9 de Julio enfrentan un aumento en sus cánones mensuales. Dependiendo del caso, los propietarios de estos locales gastronómicos deberán abonar tasas municipales que oscilan entre los $2 millones y los $4 millones por ocupar espacios de dominio público, conforme a lo dispuesto recientemente por la Municipalidad de San Miguel de Tucumán.El Boletín Oficial (BO) municipal N° 4.691, publicado el pasado lunes, establece modificaciones en las adendas de los permisos otorgados a cinco confiterías de la Capital: cuatro en el principal pulmón verde de la ciudad y una en el parque Avellaneda. Estos espacios se encuentran habilitados en virtud de una prórroga del convenio inicial concedido el año pasado, que se extenderá hasta 2028 o hasta que se elaboren los pliegos para la licitación pública.
El primer caso corresponde al bar Juana Restó, ubicado sobre la avenida Paz Posse, cerca de la escultura del Reloj Solar. En 2024, mediante el decreto N° 0433, el municipio había establecido un canon mensual de $1 millón para la firma, con reajustes trimestrales de acuerdo al Índice de Precios al Consumidor (IPC).
Con una inflación acumulada del 77,9% entre el 1 de marzo y fines de abril de este año, se estima que, a la fecha, la confitería habría llegado a pagar alrededor de $1,8 millón mensuales a la Municipalidad por el uso del espacio público.
Sin embargo, el nuevo decreto de la Secretaría de Gobierno establece que la tasa mensual deberá escalar a $4 millones, con actualizaciones cuatrimestrales ajustadas al Índice de Contratos de Locación (ICL), lo que implica un incremento del 122%.
El segundo ejemplo es el de la firma Resto Bar Americano, cuyo local, Americano del Parque, se encuentra sobre la misma avenida, a escasa distancia del anterior. A partir de este año, con la prórroga del convenio vigente, el canon mensual se fijó en $3 millones, con idéntica modalidad de actualización.
Unos metros más adelante, a la altura de la escultura Menhir Ambrosetti, se sitúa el bar Tótem. La firma Jardín Central S.R.L. pagaba un canon inicial de $800.000, que por efecto de la inflación había ascendido a $1,4 millón. La nueva actualización, del 40%, eleva la tasa a $2 millones mensuales.
El mismo porcentaje de aumento fue aplicado a la firma Bar de las Flores S.R.L., propietaria del bar Mirasoles, ubicado en el parque Avellaneda sobre la avenida Mate de Luna. En 2024 abonaba $1,6 millón, monto que por IPC se incrementó a unos $2,8 millones, y que ahora se eleva a $4 millones.
Por su parte, el local gastronómico que recibió la suba más moderada fue el bar La Rural, perteneciente a la firma Eventos Gastronómicos S.R.L. Este restaurante, situado sobre la avenida Carlos Thays, tuvo un incremento del 10% en el canon. De abonar $1 millón en marzo y luego $1,8 millón por efecto de la inflación, pasará a pagar $2 millones mensuales.
Las adendas correspondientes a cada establecimiento fueron protocolizadas ante el Registro de Ordenanzas, Decretos y Resoluciones, como parte de la cláusula segunda del convenio de prórroga del permiso de uso del espacio público celebrado entre la Municipalidad y los bares implicados.