Martes 01 de Julio de 2025, 07:04
La llegada de una ola polar al norte argentino disparó este lunes la demanda de gas natural y energía eléctrica en Tucumán. A pesar del incremento en el consumo, no se registraron cortes de suministro, ni siquiera en contratos interrumpibles o en sectores industriales sensibles como el textil. Sin embargo, el sistema se mantiene en alerta y condicionado por la persistencia de las bajas temperaturas, advierten desde la Secretaría de Energía de la provincia.De acuerdo con fuentes del mercado energético, la región del NOA ha estado recibiendo en los últimos días unos 15 millones de metros cúbicos por día (m3/día) de gas natural provenientes de Vaca Muerta, mediante el Gasoducto del Norte. En el caso particular de Tucumán, el consumo ronda entre 4 y 5 millones de m3/día.
A esta provisión se le sumaron 2,5 millones de m3/día provenientes de la Cuenca del Noroeste, y, en respuesta al pico de demanda invernal, se habilitó un refuerzo adicional: 3 millones de m3/día desde Bolivia, a través de un acuerdo entre compañías energéticas argentinas y la estatal boliviana YPFB. Con estos aportes, el suministro total alcanzó los 20,5 millones de m3/día.
Desde el Gobierno reconocen que este refuerzo fue clave para garantizar el abastecimiento en pleno invierno, aunque advierten que los niveles de servicio podrían variar si persisten las condiciones extremas de frío.
Si bien los trabajos en las plantas compresoras de Ferreyra y Dean Funes (Córdoba), Lavalle (Santiago del Estero) y Lumbreras (Salta) avanzan a buen ritmo, aún no se ha completado la infraestructura necesaria para permitir el transporte total previsto de hasta 19 millones de m3/día desde la cuenca neuquina. Las demoras en las obras del centro-oeste del sistema limitan actualmente la capacidad de transporte del Gasoducto del Norte.
En el plano eléctrico, el frío también se hizo sentir. Según datos del sector, junio de 2025 fue más frío que el mismo mes del año pasado, con un aumento en la demanda general de energía. Si bien los máximos mensuales no mostraron una brecha significativa —573,4 megavatios (Mw) este año contra 569,5 Mw en 2024—, este lunes el consumo alcanzó un nuevo pico, con 650 Mw.
A pesar de estas cifras, desde el sector eléctrico indicaron que el sistema no se encuentra aún bajo exigencia crítica, y recordaron que en febrero de 2025 se llegó a un récord de 870 Mw, mucho mayor que los valores actuales.
La buena noticia es que no se registraron interrupciones en el suministro de gas ni en el eléctrico, ni siquiera para los usuarios con contratos interrumpibles o grandes consumidores, como las empresas textiles tucumanas. No obstante, las autoridades se mantienen en estado de vigilancia permanente, ya que una eventual persistencia de la ola polar podría modificar el escenario.
Desde la Secretaría de Energía provincial confían en que la planificación anticipada y el refuerzo del suministro desde Bolivia han sido claves para evitar sobresaltos, aunque reconocen que las obras pendientes del Gasoducto del Norte siguen siendo un cuello de botella estructural para enfrentar escenarios de máxima exigencia.
En paralelo, sectores industriales y comerciales siguen de cerca la evolución de la demanda y del clima, a la espera de que el sistema pueda mantenerse estable durante lo que resta del invierno.