Con el apoyo de la Provincia, la capital encara dos obras clave poner fin a las inundaciones

Domingo 20 de Julio de 2025, 06:21

PROYECTO SUPERADOR. La idea de dos colectoras que alivien las calles de San Miguel de Tucumán en época de lluvias avanzan con respaldo de la Provincia y conversaciones con el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe.



Con la mirada puesta en resolver un problema histórico que se agrava con cada temporada de lluvias, la Municipalidad de San Miguel de Tucumán presentó su Plan de Contingencia para la prevención de inundaciones, que contempla la ejecución de dos grandes colectoras pluviales: una de cinco kilómetros en la zona norte y otra en el sur de la ciudad. Ambas estarían conectadas al río Salí y se diseñaron para mejorar el escurrimiento del agua y mitigar el impacto de las lluvias intensas.

La intendenta Rossana Chahla encabeza las gestiones para obtener financiamiento internacional que permita afrontar no solo estas obras estratégicas, sino también una batería de intervenciones menores en distintos barrios de la capital tucumana. La mandataria ya se reunió esta semana con el vicepresidente del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF), Christian Asinelli, para presentar el plan técnico.

Según detalló el secretario de Obras Públicas municipal, Luis Lobo Chaklian, el informe de diagnóstico identifica 31 puntos críticos de la ciudad, donde el sistema de drenaje colapsa recurrentemente. "Esta es una herramienta de gestión de riesgo, pero sobre todo una decisión política. Podemos seguir haciendo maquillaje o planificar seriamente hacia el futuro", sentenció el funcionario.

El proyecto más ambicioso es el de la colectora norte, que se iniciaría en las calles Panamá y Martín Berho, a la altura de avenida Juan B. Justo, y culminaría en el río Salí. "Tiene el beneficio de que el río puede absorber esa cantidad de agua", indicó Lobo Chaklian. 

Por otro lado, en el sector sur, se intervendría entre calle Alsina y avenida Roca, para aliviar zonas altamente afectadas como la calle Jujuy, donde se registran inundaciones con hasta 70 centímetros de agua dentro de las viviendas.

El presupuesto estimado para ambas colectoras ronda los 30 millones de dólares, por lo que resulta imposible para la Municipalidad asumirlos sin asistencia externa. En ese sentido, Chahla destacó el respaldo del gobernador Osvaldo Jaldo, con quien mantuvo una reunión junto al ministro de Obras Públicas provincial, Marcelo Nazur, para acordar tareas complementarias. Una de ellas incluye la limpieza y reparación del canal Sur, responsabilidad de la Provincia, actualmente en ejecución.

Además de las grandes obras, la Municipalidad avanza con un plan de pavimentación que, según Lobo Chaklian, ya mostró mejoras concretas en el escurrimiento del agua. “En marzo de 2024 tuvimos serios problemas. En 2025, en esos mismos sectores, no se repitieron con la misma intensidad”, aseguró.

Chahla remarcó que, si bien es probable que su gestión no logre concluir todas las obras en los dos años restantes de su mandato, el objetivo es “dejar un plan maestro de no inundabilidad para Tucumán”. La propuesta fue bien recibida por el Ejecutivo provincial y por entidades internacionales, con las que se iniciaron gestiones para obtener los fondos necesarios, previa autorización del Ministerio de Economía de la Nación para acceder a un crédito soberano.

Con esta estrategia, la capital tucumana da el primer paso para cambiar el paradigma de la gestión hídrica urbana, apostando por planificación estructural y cooperación institucional.