Sábado 13 de Septiembre de 2025, 07:39
Con una remera estampada con la frase “Plata o plomo”, Waldo Alexis Bilbao, uno de los narcos más buscados del país, fue detenido el viernes a la noche en pleno centro de Rosario. El operativo, encabezado por la Central de Inteligencia y Operaciones Especiales de Santa Fe, puso fin a casi dos años de fuga del capo, que se ocultaba en un departamento del piso 18 frente al Monumento a la Bandera junto a su esposa e hijos.
El Gobierno de Santa Fe había ofrecido una recompensa inédita de 50 millones de pesos por información sobre él y su hermano
Brian, alias “Patoruzek”, aún prófugo. La captura se produjo cuando intentaba escapar por un ducto de ventilación, pero fue reducido por los agentes en segundos.
La caída de Bilbao se enmarca en una investigación de largo aliento contra el clan que, según la Justicia, ingresaba cocaína desde Bolivia en avionetas y lavaba las ganancias a través de negocios legales. El antecedente más próximo fue la detención en julio de Pablo Javier Raynaud, señalado como el cerebro financiero del grupo, quien fue atrapado en un local de comidas rápidas en Buenos Aires tras rastrearse el IP de su celular.
Raynaud montó múltiples emprendimientos para blanquear dinero en Rosario, mientras que los hermanos Bilbao se encargaban de la logística narco. Los investigadores detectaron que las avionetas hacían uno o dos viajes mensuales, descargando hasta media tonelada de droga por vuelo, triangulando entre Bolivia y Paraguay.
La organización no se limitaba al contrabando. La Justicia ordenó el congelamiento de bienes a nombre de diez sociedades: desde una planta de biodiésel en Álvarez hasta una flota de taxis en Rosario manejada por la esposa de Brian. También adquirieron bares, teatros como el Vorterix de Rosario y Mar del Plata, e incluso una agencia de autos de lujo.
Según las escuchas, los pagos a pilotos llegaban a 250 mil dólares por viaje, una muestra del volumen económico del negocio. La Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar) y la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac) siguen la pista de esos movimientos.
El clan Bilbao salió a la luz tras un trágico hecho en 2020, cuando dos primos murieron al volcar la camioneta en la que transportaban droga desde una avioneta. En sus celulares, uno sin clave de bloqueo, surgieron los primeros indicios de la red.
Los fiscales aseguran que la banda también estuvo detrás de un cargamento de casi 392 kilos de cocaína hallado en una camioneta BMW en Villa Gobernador Gálvez en 2021, con nexos en Brasil y Paraguay e incluso vínculos con proveedores ligados a la banda de Los Monos.
La detención de Waldo Alexis Bilbao representa un golpe clave a la estructura del clan, pero los investigadores remarcan que Brian Bilbao continúa prófugo y que la red financiera aún debe desarticularse por completo.
El caso está a cargo del Juzgado Federal N°3 de Rosario con la intervención de un equipo de fiscales, entre ellos Adriana Saccone, Diego Iglesias (Procunar) y Diego Velasco (Procelac). Mientras tanto, el arresto de Waldo fortalece la hipótesis de que la organización narco utilizó a Rosario como base operativa para proyectarse a escala internacional.