El final del año y de un mandato en Diputados reavivan versiones de cambios en el gabinete de Jaldo

Domingo 07 de Diciembre de 2025, 09:01

EQUIPO COMPLETO. Una de las ocasiones del año en las que Osvaldo Jaldo reunió en una foto a todo su gabinete, ampliado con autoridades municipales y diputados.



La llegada de diciembre reactivó las especulaciones en la Casa de Gobierno sobre una eventual reconfiguración del gabinete provincial, un escenario que volvió a instalar un clima de expectativa e incertidumbre entre ministros, secretarios y equipos técnicos del Ejecutivo que conduce Osvaldo Jaldo. Aunque el gobernador relativiza las versiones y niega definiciones inminentes, en los despachos oficiales se multiplican los nombres que podrían salir y los que suenan como posibles incorporaciones.

Las conjeturas cobraron mayor fuerza con la finalización del mandato legislativo de Agustín “Tin” Fernández, hasta ahora diputado provincial y presidente del bloque Independencia. En los pasillos del Poder Ejecutivo muchos dan por descontado su desembarco en la estructura gubernamental, lo que alimentó todavía más las lecturas internas sobre un eventual movimiento de piezas en áreas sensibles de la administración.

Jaldo, sin embargo, intenta llevar tranquilidad puertas adentro. Ante cada consulta pública o privada, insiste en que no hay razones para alarmarse y repite una frase que ya se volvió marca registrada de su gestión: no expondrá innecesariamente a sus funcionarios. Fiel a su estilo, el mandatario reivindica la idea de sostener al equipo con el que inició su gestión, aunque admite, sin rodeos, que existen sectores que muestran falencias a la hora de responder al ritmo y a las exigencias de la gestión diaria.

El gobernador también reconoce la existencia de tensiones internas, una constante en cualquier estructura política de poder, aunque se esfuerza por bajarle el tono a esas disputas y evitar que se transformen en crisis abiertas. En ese equilibrio entre respaldo político y exigencia de resultados se mueve hoy la lógica de conducción del Ejecutivo provincial.

Por ahora, todo indica que el receso estival no traerá sobresaltos inmediatos y que el verano transcurrirá con relativa calma para los funcionarios. Sin embargo, en la Casa de Gobierno nadie se siente completamente a salvo. La experiencia indica que Jaldo suele tomarse su tiempo, evaluar escenarios y medir impactos antes de avanzar, pero cuando decide hacerlo, los cambios llegan sin demasiados avisos previos.

Mientras tanto, el mandatario se mantiene en modo reflexión, observando el tablero político y administrativo, repensando nombres y áreas, y sosteniendo un mensaje ambiguo que combina tranquilidad pública con señales internas de que nada está definitivamente cerrado. En el universo del jaldismo, diciembre es sinónimo de balance… y también de expectativa contenida.