Electrodomésticos están 25% más baratos por la importación y la baja de precios continuará

Domingo 07 de Diciembre de 2025, 20:05





El mercado de electrodomésticos finaliza 2025 con una caída de precios que llega al 25% en las principales categorías, en un año marcado por un fuerte aumento de las importaciones, la reducción de impuestos y un consumo debilitado que obligó a fabricantes y cadenas a acelerar promociones para mover el stock. La combinación de estos factores configuró uno de los períodos de mayor deflación del rubro en la última década y anticipa un escenario similar para el año próximo.

Las primeras bajas se observaron tras la rebaja inicial de aranceles en mayo; pero el impacto mayor, coinciden empresas y analistas, provino del acceso pleno al mercado de cambios, la eliminación de las SIRAs, la desaparición del Impuesto PAÍS y la caída en los costos logísticos. “El mix generó un escenario más competitivo y precios más bajos”, afirmó Luis Galli, CEO de Newsan.

Según datos de plataformas de venta propias y de Mercado Libre, los televisores, celulares, heladeras, aires acondicionados y lavarropas registraron retrocesos de entre 3% y 26% entre enero y diciembre. El caso más marcado fue el de los Smart TV: un Hisense de 32 pulgadas bajó de $299.000 a $219.999, lo que implica una reducción del 26%.

En celulares, un Motorola E14/E15 retrocedió 15% y la categoría sumó competencia con la llegada masiva de marcas chinas como Tecno, Infinix, Oppo y Realme, además del regreso de Huawei. Las heladeras, por su parte, mostraron caídas más moderadas: un modelo cíclico de 290 litros de Philco pasó de $640.000 a $599.999 (-6%), mientras la importación de este segmento creció 387,1% hasta octubre, según el Indec.

El aumento más drástico ocurrió en lavarropas, cuya importación escaló 924,2%, un factor que impactó en el cierre de plantas como la de Whirlpool. En ese producto, la baja de precios llegó al 3%. También retrocedieron los equipos de aire acondicionado: un split de 3.000 frigorías de Sansei cayó 7% en el año.

Para los analistas, la apertura y la competencia externa comprimieron márgenes y forzaron una corrección de precios que había quedado desfasada tras los aumentos anticipados de fines de 2023. “Las empresas no pueden subir precios porque quedan fuera del mercado. La estructura de costos también cambió, porque muchos fabricantes se reconvirtieron en importadores”, explicó Haroldo Montagu, socio de la consultora Vectorial.

En la Ciudad de Buenos Aires, el retroceso relativo es aún más marcado: desde noviembre de 2023, los electrodomésticos aumentaron 78,4% frente a un IPC que escaló 259,3%. “Eso implicó un abaratamiento relativo de 50%. A dólar oficial, los valores cayeron 56,1%”, precisó Ricardo Delgado.

Las promociones también jugaron un papel clave. A diferencia de otros años, cuando las ofertas se concentraban en fechas como Hot Sale o Cyber Monday, en diciembre las marcas llegaron a las Fiestas con descuentos de hasta 20% y programas de financiación acotados. Mirgor destacó que el rubro no tuvo una rebaja directa, sino “más competitividad promocional”, lo que generó bajas relativas no vinculadas a costos.

La sobreoferta y el avance del “mercado gris” —productos ingresados de manera informal que evitan impuestos— presionaron aún más. “Representa una competencia desleal que distorsiona precios”, señalaron en una cadena, donde confirmaron que el ticket promedio cayó entre 31% y 50% medido en dólares en celulares, electro de cocina, aires acondicionados, heladeras, lavarropas y televisores.

Con los aranceles que terminarán de eliminarse el 15 de enero y un flujo de importaciones que sigue alto, el sector espera que los precios continúen descendiendo en 2026, aunque advierte que la rentabilidad sigue en niveles mínimos y que la recuperación del consumo será determinante para estabilizar la oferta.