El acusado de degollar a una mujer en La Matanza se negó a declarar ante la Justicia

Martes 30 de Diciembre de 2025, 18:00

Manuel Alberto Norry fue imputado por los delitos de homicidio agravado por el vínculo y femicidio, según informaron fuentes del caso.



Manuel Alberto Norry, el único detenido por el femicidio de Karina Janet Arotinco Palomino en el partido bonaerense de La Matanza, se negó a declarar este martes ante el fiscal Adrián Arribas, a cargo de la investigación.

El hombre, de 46 años, fue imputado por homicidio agravado por el vínculo y femicidio, delitos que prevén la pena de prisión perpetua, según informaron fuentes judiciales. Permanecerá detenido mientras avanza la causa.

El crimen ocurrió durante el fin de semana en Lomas del Mirador. En las últimas horas, los investigadores lograron reconstruir el recorrido completo que realizó el agresor tras el ataque, a partir del análisis de cámaras de seguridad de la zona. En un tramo clave, se observó que el sospechoso regresó sobre sus propios pasos hasta perderse en un sector previamente identificado por los peritos.

En esa cuadra residía una amiga de la víctima, y en uno de los domicilios —un complejo de varios departamentos— se obtuvo una imagen nítida del rostro y la fisonomía del acusado. Esa prueba permitió identificarlo como empleado de un bar ubicado en la Ciudad de Buenos Aires, presuntamente propiedad de un familiar.

Según la investigación, Norry tenía acceso habitual a cuchillas de gran tamaño por su trabajo, lo que habría facilitado la obtención del arma utilizada para cometer el crimen.

Con esta información, los agentes se dirigieron al comercio, donde los propietarios reconocieron al sospechoso y señalaron que el hombre tenía intenciones de entregarse. Finalmente, tras un extenso diálogo con su familia, Norry fue detenido en la noche del lunes en Lomas del Mirador.

Fuentes del caso confirmaron que la víctima y el acusado mantenían una relación sentimental y que Norry era cuñado de la amiga con la que Karina había salido a bailar horas antes del femicidio.

Un dato clave para la causa fue el comportamiento del perro de la víctima: el animal reconocía al atacante, lo que reforzó la hipótesis de que ambos se conocían previamente.

La investigación continúa mientras se aguardan nuevas medidas judiciales.