El emocionante agradecimiento de la hija de Sergio Denis al Hospital Padilla

Un médico es, por definición, una persona que intenta mantener y recuperar la salud humana. Alguien que se ocupa, mediante sus estudios y formación, de la vida de los demás. Pero para nosotros hoy es mucho más que eso. En lo personal, siempre creí que esta profesión tan admirable era solo para unos pocos.

Para personas con una capacidad diferente, quizás más frías o distantes como para poder soportar tanto. Todos estos días que pasamos sobre todo en el hospital y en sus inmediaciones, vimos ir y venir a miles de enfermeros y enfermeras, a chicos y a chicas que recién salen a la vida y enfrentan la muerte.

Todos estos días, médicos y médicas, a cada segundo y en cada situación no dejaron de asombrarnos por la vida que llevan, por su dedicación, por su inquebrantable voluntad, por el amor con el que hacen su trabajo. Día a día, miles de horas, miles de guardias en las situaciones más adversas y con una entereza que hace que hoy no tenga más que un agradecimiento infinito hacia ellos y ellas. Todas las palabras que pueda usar son tan chiquitas ante semejantes personas.

El tiempo que se tomaron en explicarnos cada detalle con toda la complejidad que revestía. Todos los mensajes en horas no laborales que recibimos. Todo el tiempo que no vimos pero que estuvieron ahí, tratando de salvarlo. Y toda la calidez con la que nos trataron desde el minuto cero, cuando en el viaje, hasta ese momento, nadie había podido estar a su lado.

Esos médicos y esas médicas, los enfermeros y las enfermeras, fueron una familia hermosa que cualquiera querría tener. Van a quedar de por vida en nuestros corazones y en cada una de nuestras plegarias. Ojalá pudiera alcanzar con decir gracias Doctor, gracias Doctora. Y a cada uno de los que estuvieron ahí desde la seguridad del hospital, los enfermeros, los porteros, los guardias de toda la institución y la comunidad hospitalaria. Gracias por brindarnos todo su apoyo y por ser idóneos en sus tareas.