Pensó que tal vez les habían robado. Pero tras una inspección más profunda, descubrió que no faltaba nada y que su hogar estaba impecablemente limpio.
Nate Roman vive en una casa unifamiliar en Marlborough, Massachusetts.
Roman le dijo a CNN que se fue a trabajar la mañana del 15 de mayo y regresó a casa después de recoger a su hijo para descubrir que su puerta estaba abierta.
“[Mi hijo dijo]: ‘¡Papá! La puerta está abierta’. Lo cual hago siempre que hay luna azul y no pensé en nada. Pero cuando entramos, de inmediato se percibía que algo andaba mal en la casa”.
Roman se dio cuenta de que alguien pudo haber estado en su casa porque una puerta que normalmente mantiene abierta estaba firmemente cerrada. Roman luego subió las escaleras para revisar el resto de la vivienda.
Descubrió que la habitación de su hijo, que estaba hecha un desastre cuando se fueron esa mañana, estaba limpia como un alfiler. Encontró su habitación en la misma condición.
Inmediatamente llamó a la policía, y se tomaron el incidente muy en
serio. Revisaron la casa para asegurarse de que no hubiera nadie allí.
La policía le dijo a la afiliada de CNN, WBZ-TV, que hablaron con los vecinos y que nadie vio nada sospechoso.
“No ocurrió ningún delito, no faltaba nada ni estaba dañado, por lo que la policía tiene muy poco que seguir”, dijo Roman.
El
sistema de seguridad tampoco estaba configurado, por lo que las cámaras
que se encenderían al activarse la alarma no registraron imágenes del
intruso. La marca de tiempo en los sensores de la puerta indicaban que
quienquiera que haya entrado a la casa estuvo ahí unos 90 minutos.
Más
tarde, Roman descubrió rosas hechas de papel higiénico en el baño, un
detalle que le hizo darse cuenta de que probablemente era obra de un
profesional. Su teoría es que un servicio de limpieza llegó a la
dirección equivocada, pero su cocina estaba intacta, lo que lo hace
dudar.
Desde entonces ha cambiado sus cerraduras y admite que
todavía abre los gabinetes con mucho cuidado en caso de que algo
inesperado aparezca.
Roman espera seguir adelante con su vida, pero de todos modos se quedó con las rosas de papel higiénico como recuerdo.