Viernes 27 de Noviembre de 2020, 14:19
Diego Armando Maradona siempre tuvo distintas peculiaridades dentro y fuera de las canchas de fútbol. Una de ellas era que desde hace mucho tiempo usaba dos relojes, uno en cada una de sus muñecas. ¿La razón? Muy simple: le gustaba llevar uno ajustado a la hora local del lugar donde se encontraba y el otro sincronizado con la de la Argentina, para sentirse siempre conectado a su tierra natal.En algún tiempo solía llevar modelos de Rolex, pero en 2010, en la época en la que era el entrenador de la Selección Argentina, se convirtió en embajador de Hublot, y desde entonces sólo se le vio con piezas de esta empresa suiza.
En una de las últimas ceremonias de los premios The Best de la FIFA, Maradona fue viral en las redes sociales por una imagen en la que aparecía exhibiendo sus dos grandes relojes en la alfombra roja previa a la entrega de los galardones.
La revista Time fue quien reveló que el legendario N° 10 argentino empezó a llevar un reloj en cada una de sus muñecas desde su etapa como jugador de Napoli. El curioso detalle va más allá de supersticiones o algo parecido, eran simples gustos del ex astro del fútbol.
Diego Maradona en una de las ceremonias de la FIFA Fuente: LA NACION - Crédito: DPA
El ’Big Bang’ fue la primera fue una versión uno de los modelos más icónicos de Hublot, cuya principal diferencia era que el cronómetro situado a las 9 había sido modificado para contabilizar cada parte de un partido de fútbol. Los índices numéricos se presentaban también en azul y blanco -los colores de la selección argentina- y en la esfera negra se podía ver asimismo un gran ’10’ a las 3 y la firma de Maradona.
Aunque esta no sería la única edición limitada, ya que unos años más
tarde la marca lanzó el ’Hublot King Power Diego Maradona Limited
Edition’, con características similares al ejemplar anterior, pero con
una aguja más para medir el tiempo de juego en una escala que rodea todo
el reloj. Había dos modelos: uno de cerámica, y otro de oro. Del
primero se crearon 500 unidades, y del segundo sólo 200. Algunas de las
excentricidades en la vida de una leyenda. /La Nación
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