Dos futbolistas se habrían acostado con las esposas de sus compañeros

Jueves 01 de Diciembre de 2022, 07:40

Vlahovic y Gudelj se habrían acostado con la esposa del arquero Predrag Rajkovic y con la mujer de Luka Jovic, otro de los goleadores del equipo.



Un escándalo sexual explotó en el Mundial de Qatar y tiene como protagonistas a los jugadores de la Selección de Serbia, que en los próximos días se jugarán el pase a los octavos de final en el grupo que completan Brasil, Suiza y Camerún.

Según deslizó el periodista británico Richard Wilson en una serie de tuits, dos jugadores del equipo balcánico se habrían acostado con las mujeres de dos de sus compañeros, provocando un incendio absoluto en el vestuario.

Un caso similar ocurrió en la Argentina entre los jugadores Horacio Ameli y Eduardo Tuzzio, que por entonces eran futbolistas de River.

Los protagonistas de esta historia serían el goleador y figura del equipo Dusan Vlahovic, que aún no fue titular en ningún partido por motivos que se desconocen, y Nemanja Gudelj, futbolista del Sevilla.

Según informa este periodista, Vlahovic y Gudelj se habrían acostado con la esposa del arquero Predrag Rajkovic y con la mujer de Luka Jovic, otro de los goleadores del equipo.

“No estoy diciendo que las cosas al comienzo de este hilo hayan sucedido, solo digo cuál es el rumor ampliamente difundido. Pero lo que sucedió daría crédito a la teoría de que hay una gran pelea que involucra a Vlahovic y que el estado físico no es lo único por lo que no juega”, señaló el periodista después.

Vlahovic y Gudelj se habrían acostado con las esposas de dos de sus compañeros.


El periodista deslizó que la supuesta razón por la que Vlahovic no está jugando es por el hecho de que presuntamente tuvo un romance con la esposa del portero Rajkovic.

Además, según pudo averiguar por fuentes allegadas al jugador, su estado físico es óptimo y la decisión de que no sea titular es propia del entrenador.

El cronista informó también que Nemanja Gudelj se habría acostado con la pareja de Luka Jovic, Sofija Milosevic, y que ambos terminaron a los golpes durante un entrenamiento.

Sofija Milosevic (izquierda), la pareja de Luka Jovic, y Ana Rajkovic, pareja del arquero suplente



El caso Tuzzio-Ameli, que sacudió el fútbol argentino

Hace 17 años, River vivió uno de sus momentos más dramáticos fuera de una cancha de fútbol, después de que Horacio Ameli y Eduardo Tuzzio, defensores titulares del equipo, se pelearan por una infidelidad.

Según pudo reconstruirse con el correr de los años, Ameli empezó una relación amorosa con la esposa de Tuzzio, lo que generó una explosión en el equipo de Núñez cuando se supo la noticia.

Federico Domínguez, integrante de ese plantel, habló sobre cómo lo tomaron los jugadores y cuál fue el rol de Marcelo Gallardo, capitán del equipo, para tratar de que el problema entre los defensores no incidiera en el rendimiento futbolístico del equipo.

“Yo recién había llegado, era mi primer semestre, tenía toda la ilusión de ganar la Libertadores. Íbamos bien en el campeonato y en la Copa terminamos primeros en el grupo, invictos, habíamos empatado un solo partido”, pone en contexto Domínguez cuando, en diálogo con La Nación, le consultan cómo se habían enterado del escándalo.

“Íbamos a empezar la práctica, Astrada nos juntó en el medio del campo, señaló un par de cuestiones futbolísticas, nos felicitó por esa primera fase, nos dijo que estábamos por el buen camino pero que se venía lo más difícil. Y cuando terminó de hablar, apareció Tuzzio y dijo lo de Ameli y su esposa”, relató el exdefensor.

Cuando le repreguntaron por la reacción del plantel, reconoció que “se quedaron helados” y que de la sorpresa pasaron a separarlos, porque se querían pelear.

“Se suspendió el entrenamiento y después fue un gran quilombo todo: muy difícil de gestionar para Astrada y muy difícil de llevar para el grupo”, aseguró.

Entonces, recordó también que el DT determinó que entrenaran en horarios diferentes y que los iba a rotar diariamente.

Eduardo Tuzzio y Horacio Ameli.


Para los partidos en el campeonato local utilizaba a uno y no al otro, y para el encuentro siguiente cambiaba.

En la Libertadores jugaban, juntos que no se hablaban.

“Yo concentraba con Diogo, el otro lateral, y nos decíamos: ‘Estos muchachos no se hablan, tenemos que estar más atentos que nunca’. Los laterales siempre se hablan con los centrales, pero acá teníamos que hacerlo entre nosotros y en el Monumental, con todo el griterío, era imposible. Era muy, muy jodido”, afirmó. /TN