Las tres profesiones que deberían aprender a usar IA para no quedarse fuera del mercado

Sábado 05 de Octubre de 2024, 15:06

A medida que las herramientas de IA son más sofisticadas, los trabajadores de varios campos deben aprender a integrarlas para mantenerse relevantes y competitivos.



La inteligencia artificial ya cambió la sociedad. No solo en el aspecto de generación de imágenes, videos o textos, sino que abarca muchos aspectos de la vida cotidiana, el entretenimiento, la educación y el trabajo.

En cuanto al panorama laboral, está en pleno proceso de transformación de la forma en que realizamos las tareas y tomamos decisiones.

Desde la automatización de procesos rutinarios hasta la mejora de labores complejas, la IA redefinió el funcionamiento de industrias enteras y cambió las expectativas sobre lo que significa ser un profesional en el siglo XXI.

A medida que las herramientas de IA se vuelven más sofisticadas, es importante que los profesionales de varios campos aprendan a integrarlas en su trabajo diario para mantenerse relevantes y competitivos.

Sin embargo, su integración en diversas profesiones también plantea desafíos significativos. Aquellos que no se adapten corren el riesgo de volverse obsoletos en un entorno laboral cada vez más automatizado.

Es importante que los trabajadores de varios campos aprendan a integrar la IA para mantenerse relevantes y competitivos. (Foto: AdobeStock).
Esta son las profesiones y carreras que deberían incorporar inteligencia artificial a sus capacitaciones

Medicina

La IA está revolucionando el campo médico al mejorar la precisión diagnóstica y optimizar los procesos clínicos. Herramientas como algoritmos de aprendizaje automático pueden analizar grandes volúmenes de datos médicos, como imágenes de resonancia magnética e historiales clínicos, para identificar patrones que pueden pasar desapercibidos para los profesionales humanos.

Estos avances no solo aumentan la tasa de diagnóstico temprano, sino que también mejoran los porcentajes de supervivencia y reducen costos asociados con tratamientos avanzados.

Entre las aplicaciones específicas en el ámbito de la medicina podemos encontrar:

Diagnóstico asistido: sistemas de IA que ayudan a los médicos a diagnosticar enfermedades comunes mediante el análisis de imágenes.

Medicina personalizada: permite el desarrollo de tratamientos específicos basados en datos genéticos y clínicos individuales, para mejorar la eficacia terapéutica.

Prevención de enfermedades: al analizar datos a gran escala, la IA puede identificar factores de riesgo y predecir enfermedades antes de que se manifiesten clínicamente.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la demanda de médicos que estén capacitados para usar inteligencia artificial aumentará durante la próxima década, especialmente en áreas como la radiología, la genética y la cirugía robótica.

Un claro ejemplo es el uso de asistentes robóticos en cirugías. Estos sistemas no solo mejoran la precisión quirúrgica, sino que también permiten a los cirujanos realizar procedimientos a distancia. Aquellos médicos que no adopten estas innovaciones pueden encontrar sus habilidades obsoletas frente a un entorno que exige un conocimiento fluido sobre tecnologías avanzadas.

También corren el riesgo de perder eficacia en su práctica clínica. La capacidad de interpretar datos generados por algoritmos de IA se está convirtiendo en una habilidad esencial. Con el auge de asistentes virtuales y sistemas automatizados que pueden ofrecer recomendaciones diagnósticas y terapéuticas, es crucial que los profesionales médicos integren estas herramientas en su trabajo diario.

Abogacía

La IA ya desempeña un papel crucial en la abogacía al facilitar tareas, como la investigación legal y la revisión de documentos. Herramientas basadas en IA ya son capaces de analizar contratos y escritos legales a una velocidad y precisión mucho mayores que los humanos, lo que permite a los abogados concentrarse en aspectos más estratégicos de su trabajo.

Además, la IA puede colaborar en:

Análisis predictivo: algoritmos que predicen resultados legales basándose en datos históricos, para ayudar a los abogados a formular estrategias más efectivas.

Automatización de tareas repetitivas: la IA puede encargarse de tareas administrativas, y liberar tiempo para que los abogados se concentren en casos complejos.
Un ejemplo notable es el uso de plataformas que analizan contratos automáticamente para identificar riesgos o cláusulas problemáticas. Estas herramientas no solo ahorran tiempo, sino que también aumentan la precisión y reducen errores humanos.

Los abogados deben desarrollar habilidades tecnológicas para utilizar herramientas de IA de manera eficaz. Esto incluye el aprendizaje sobre software específico y comprensión básica del análisis de datos. La falta de adaptación podría resultar en una disminución del valor profesional en un entorno cada vez más automatizado.

Programación

El mundo de la programación experimentó una transformación significativa gracias a la IA. Pero para integrar los beneficios de esta tecnología, los programadores necesitan aprender un conjunto de nuevas habilidades técnicas, ya que las herramientas automatizadas modificaron la forma en que se escribe código.

Los entornos de desarrollo integrados (IDE) ahora ofrecen funciones asistidas por IA que sugieren código o detectan errores automáticamente. Además, IA puede analizar el código existente para sugerir mejoras o identificar vulnerabilidades.

Para los programadores, aprender sobre inteligencia artificial no es solo una ventaja competitiva; es una necesidad. La capacidad para trabajar con tecnologías emergentes como machine learning y deep learning será fundamental para el futuro del desarrollo software.

Las herramientas como TensorFlow o PyTorch ya permiten a los desarrolladores construir modelos predictivos y sistemas inteligentes con mayor facilidad. Programadores que no se familiaricen con estas herramientas perderán oportunidades valiosas en un mercado laboral cada vez más competitivo. /TN