Secretos de los restaurantes para que la carne quede súper tierna

Miércoles 06 de Noviembre de 2024, 09:01

Con técnicas sencillas, cualquier persona puede disfrutar de un plato de calidad profesional.



Lograr una carne blandita y jugosa es uno de los secretos mejor guardados de los chefs y restaurantes de todo el mundo. Muchos se preguntan cómo hacer para que la carne quede súper tierna, especialmente al buscar el sabor y esa textura suave para que se deshaga en la boca.

El tipo de corte juega un papel fundamental en el resultado final, y las técnicas de cocción y marinado que emplean los profesionales realmente marcan la diferencia. 

Conocer los trucos y estrategias es ideal para aquellos que buscan mejorar sus habilidades culinarias en casa.

La elección del tipo de carne, está dicho, es fundamental. 

¿Pero qué cortes son los que los restaurantes utilizan? Son varios, en una variedad que también aporta diferentes sabores, pero los más populares que representan una carne tierna incluyen al lomo, la costilla, la falda y la entraña, lógicamente cada uno con características y usos específicos.

Los cortes de carne de res, por ejemplo, se dividen en partes más blandas y otras más duras. Los cortes del lomo, como el solomillo, son naturalmente más tiernos debido a su ubicación y menor cantidad de tejido nervioso, lo que permite cocciones más rápidas y delicadas.

Por otro lado, los cortes como el osobuco y la falda, que requieren cocciones prolongadas para alcanzar su máximo potencial de terneza. Esto es porque tienen una mayor cantidad de fibras y colágeno que, con el tiempo de cocción adecuada, se transforman en una textura suave y deliciosa.

Cómo lograr una carne tierna en casa

El bicarbonato de sodio es un aliado sorprendente cuando se trata de ablandar carne. Este ingrediente común actúa modificando el pH de la carne, lo que ayuda a romper las fibras musculares, logrando una textura suave.

La técnica es simple: se espolvorea una pequeña cantidad de bicarbonato sobre la carne y se deja reposar entre 15 y 30 minutos. Después de ese tiempo, es importante enjuagar con agua la carne para eliminar cualquier residuo de bicarbonato, asegurándose de que el sabor no se vea afectado. Una vez preparada la carne con bicarbonato, el resultado es una textura mucho más tierna, ideal para guisos, asados o parrilladas.

Además del bicarbonato de sodio, existen otras técnicas populares para ablandar la carne y obtener una textura suave, como los marinados ácidos de limón, vinagre o yogur ayudan a descomponer las fibras de la carne. Los ácidos actúan sobre el colágeno, facilitando una textura más tierna.

También se puede hacer con salmuera, que consiste en sumergir la carne en una mezcla de agua y sal es un método que ayuda a retener la humedad, favoreciendo la ternura al momento de cocinarla.

La cocción lenta es una buena opción para cocinar la carne a baja temperatura por un tiempo prolongado, como en estofados o al horno, permite que el colágeno se descomponga, creando una textura suave.

Reposo después de la cocción también es clave para lograr una carne súper tierna. Una vez cocinada, dejar reposar la carne unos minutos permite que los jugos se redistribuyan, manteniendo la jugosidad.

Los beneficios de comer carne

Consumir carne tiene un impacto directo en el fortalecimiento de los músculos, gracias a su contenido proteico y a su aporte de hierro y zinc. Estos nutrientes no solo ayudan a desarrollar masa muscular, sino que también apoyan la recuperación y reparación de tejidos, especialmente después de realizar actividad física. Además, el hierro que aporta la carne es esencial para el transporte de oxígeno en el cuerpo, lo cual es clave para la resistencia física.

Por otro lado, el zinc que contiene la carne favorece el sistema inmunológico y ayuda a la producción de enzimas antioxidantes, que protegen al cuerpo del daño celular. La vitamina B12, fundamental para el sistema nervioso, también ayuda en la producción de glóbulos rojos, lo que contribuye a la energía y al bienestar general.  /TN