Jueves 23 de Enero de 2025, 06:25

HALLAZGO. Además de celulares y dinero, habituales en todo allanamiento por drogas, los policías se toparon con el opioide sintético utilizado para crear uno de los alucinógenos más temidos en el mundo.
El hallazgo de nalbufina, un opioide sintético similar al fentanilo, durante un allanamiento por robo en Tucumán ha encendido las alertas de las autoridades. La sustancia, conocida por su uso en entornos médicos, podría ser peligrosa si se combina para crear compuestos similares a la llamada "droga zombi", que causa estragos en otros países. Este es el segundo decomiso de este tipo en la provincia, lo que intensifica las investigaciones.Leé también: Alerta en Tucumán: hallan droga vinculada con el "fentanilo zombie"
El caso comenzó como una investigación por el robo de una motocicleta en el puente Lucas Córdoba. Personal de la comisaría 11ª identificó a dos sospechosos, conocidos como
“Panflín” y
“Ortega”, y realizó allanamientos en sus domicilios en el barrio Toledo. Aunque ninguno tenía antecedentes por narcotráfico, durante el operativo se encontraron psicofármacos, recetas presuntamente falsas, el sello de un médico aún no identificado, y nueve ampollas de nalbufina.
“La droga no está incluida en las listas de sustancias ilícitas, pero su venta sin autorización constituye un delito contra la salud pública”, explicó
Mariana Rivadeneira, titular de la Unidad de Delitos Complejos, que ahora investiga el caso.
La nalbufina pertenece a la misma familia de analgésicos que el fentanilo, utilizado en medicina para tratar el dolor extremo. Si bien su uso está estrictamente controlado, las autoridades temen que caiga en manos de personas que sepan modificarla o combinarla con otras sustancias para generar efectos altamente adictivos y peligrosos.
“Lo que tenemos es suficiente para actuar de manera inmediata. No podemos permitir que algo tan peligroso llegue a la calle”, afirmó el subsecretario de Lucha contra el Narcotráfico,
Jorge Dib. Las ampollas secuestradas tienen sellos oficiales de la ANMAT y un número de lote que podría ayudar a rastrear su origen.
El ministro de Seguridad, Eugenio Agüero Gamboa, destacó que este hallazgo forma parte de una creciente preocupación por el tráfico de drogas sintéticas en el país. “Sabemos que la droga zombi, una combinación de fentanilo con otras sustancias, está causando estragos en otros lugares. Aunque en Tucumán no hemos detectado consumo de esta sustancia, no podemos bajar la guardia”, señaló.Las reuniones recientes entre el Ministerio de Seguridad y el de Salud revisaron los protocolos de control en el sistema sanitario. “Podemos decir que son correctos, pero aún queda mucho por investigar para determinar cómo estas ampollas llegaron a las manos equivocadas”, agregó Gamboa.
Especialistas como
Emilio Mustafá, psicólogo social y experto en adicciones, advirtieron sobre el riesgo de que estas sustancias lleguen al mercado ilícito. “Con el paco y la cocaína ya estamos en una situación límite. No podemos permitir que algo como esto se transforme en una tragedia social”, afirmó.
Según Mustafá, el consumo de fentanilo en Argentina, aunque todavía limitado, ha estado asociado principalmente a personal hospitalario con acceso a estos medicamentos. Sin embargo, el hallazgo en Tucumán sugiere que el problema podría estar expandiéndose.
Mientras las autoridades trabajan para rastrear el origen de las ampollas y determinar si el sello médico encontrado fue robado o falsificado, el gobernador Osvaldo Jaldo pidió llegar “hasta el fondo” de este caso. “No descartamos que esta droga haya sido obtenida con el objetivo de modificarla o revenderla ilegalmente”, expresó Dib.
Con el hallazgo de nalbufina, Tucumán se enfrenta a una nueva dimensión en la lucha contra las drogas, que podría marcar un antes y un después en las estrategias de seguridad pública y control de sustancias en la provincia.
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