Lunes 28 de Abril de 2025, 21:36
Luego de ocho meses de haberse “desenganchado” de las paritarias del Congreso, los senadores nacionales volverán a percibir aumentos en sus dietas, alcanzando ingresos cercanos a los $9 millones brutos. El incremento se da tras el vencimiento del congelamiento salarial votado el año pasado, y sin que desde la Cámara Alta se promoviera una nueva prórroga para frenar el ajuste. La situación generó una fuerte crítica del presidente Javier Milei.
En marzo pasado, caducó el congelamiento de dietas dispuesto en 2023 y prorrogado por la vicepresidenta Victoria Villarruel. Sin un nuevo pronunciamiento del Senado, los aumentos salariales acordados a principios de abril entre los gremios legislativos y las autoridades impactarán directamente en los sueldos de los legisladores.
Desde este mes, los senadores que residen a más de 100 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires -es decir, la mayoría- verán sus ingresos brutos elevarse a aproximadamente $9.144.000. Esto representa más de 30 veces el valor de una jubilación mínima, recientemente actualizada a $296.481, consignó Ámbito.
El mecanismo de aumento surge de la propia normativa aprobada por el Senado en 2023, que estableció que las dietas se calcularan en función de módulos. Actualmente, cada módulo fue fijado en $2.286 tras las últimas paritarias. Así, el salario base se compone de 2.500 módulos más otros 1.500 módulos adicionales por gastos de representación y desarraigo para los senadores del interior.
Durante abril, el Senado mostró acuerdos inusuales en dos momentos: primero, al votar de forma unánime un homenaje al Papa Francisco; y segundo, al mantener el silencio ante el impacto de las paritarias en sus sueldos. Solo el senador cordobés Luis Juez pidió, sin éxito, pidió que los aumentos no se aplicaran a su dieta.
La reacción de Milei
Al conocerse la noticia, el presidente Javier Milei criticó duramente a los legisladores a través de sus redes sociales. Publicó una imagen de dos ratas vestidas con camisetas de "Unión por la Patria" y el mensaje: "Las ratas del Senado evitaron congelar su dieta, van a cobrar 9 millones de pesos por mes".
Cabe aclarar que la vicepresidenta Victoria Villarruel, enfrentada políticamente con Milei en los últimos meses, no percibe los mismos ingresos que los senadores. Su sueldo depende de la Casa Rosada y actualmente cobra alrededor de $2,9 millones netos.
Mientras el ajuste golpea a los sectores más vulnerables y los trabajadores legislativos denuncian una pérdida salarial cercana al 66% respecto de la inflación, la actualización automática de las dietas de los senadores reabre el debate sobre los privilegios de la dirigencia política en plena crisis económica.