Jueves 15 de Mayo de 2025, 06:21

SIGUE EL MISTERIO. Héctor Romero, acusado y detenido en noviembre de 2024, fue sobreseído, con lo que la causa por la desaparición de María Cash volvió a foja cero.
La Justicia Federal de Salta sobreseyó y ordenó la inmediata liberación de Héctor Romero, el camionero que hasta hace pocas semanas era considerado el principal sospechoso en la desaparición de la diseñadora María Cash, ocurrida en julio de 2011.
La medida, dispuesta por la jueza Mariela Giménez, titular del Juzgado Federal N°2 de esa jurisdicción, marca un giro decisivo en una de las investigaciones más emblemáticas y dolorosas del país, que sigue sin hallar respuestas ni responsables tras casi 14 años.
Romero, que había sido imputado por el delito de homicidio agravado por alevosía, fue detenido en noviembre de 2024 en la ciudad de Salta, luego de que nuevas líneas investigativas lo ubicaran como la última persona que vio con vida a la joven diseñadora. Sin embargo, la jueza dictó su sobreseimiento al considerar que no existen elementos probatorios que lo vinculen con la desaparición ni con un posible crimen.
“El fallo se basa en un análisis minucioso de más de 420 fojas con pruebas científicas, pericias, testimonios y tareas de inteligencia que confirmaron la inocencia de mi defendido”, señaló el abogado
Fernando Díaz, quien asumió la representación legal de Romero el 25 de noviembre pasado. “No sólo quedó demostrado que Romero no tuvo participación en la desaparición, sino que el proceso no afectará el buen nombre y honor que siempre mantuvo”, subrayó.
Durante su imputación, Romero negó cualquier vinculación delictiva y ratificó su declaración original: dijo haber levantado a María Cash en la ruta el 8 de julio de 2011, y haberla dejado en la zona de Joaquín V. González, donde él trabajaba como chofer para un empresario supermercadista. Su testimonio había sido clave durante los primeros años de la causa, pero nunca se logró establecer un vínculo directo con la desaparición de la joven.La detención de Romero había generado una fuerte repercusión mediática, sobre todo por la declaración del fiscal federal Eduardo Villalba, quien entonces sostuvo que “todo indica que Romero le quitó la vida a María Cash e hizo desaparecer el cuerpo”. Incluso se impulsaron nuevos rastrillajes en zonas rurales de Salta. Sin embargo, ninguna de esas diligencias arrojó resultados concluyentes.
El sobreseimiento deja a la causa sin un principal sospechoso y expone la fragilidad de una investigación que lleva más de una década acumulando hipótesis y escasos avances concretos. La desaparición de María Cash, vista por última vez en la ruta 34 mientras hacía dedo, continúa siendo uno de los casos más dolorosos y enigmáticos de la historia criminal argentina reciente.
Romero, que fue detenido en el domicilio de un familiar en Salta capital, recuperó la libertad tras cinco meses de prisión preventiva. La jueza también destacó en su resolución que “la investigación debe proseguir bajo nuevas hipótesis, dado que no hay pruebas suficientes para mantener la acusación”.
La familia de María Cash aún no se ha pronunciado sobre el fallo, aunque en distintas oportunidades han reiterado su deseo de que el caso se resuelva con verdad y justicia. Mientras tanto, el expediente continuará abierto, pero sin un sospechoso firme y con más preguntas que respuestas. La sociedad, como los seres queridos de María, sigue esperando.
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