Las dos caras del consumo: suben las compras de casas y autos y bajan las de alimentos
Martes 03 de Junio de 2025, 06:19
Gracias a una combinación de factores como el descenso de la inflación, la apreciación cambiaria y la reaparición del crédito, se registran récords en escrituras de propiedades y patentamientos de autos y motos, mientras que la mayoría de la poblacióLa recuperación de algunos indicadores económicos muestra una doble vía: por un lado, se registra un récord en compra-venta de propiedades, autos, motos y viajes; por otro, millones de familias ajustaron sus consumos cotidianos al límite hasta dejar de comprar gaseosas, postres y carne.
D’Alessandro explicó que los sectores que pueden comprar bienes suntuarios y durables por lo general lo hicieron tras blanquear dólares o aprovechar reducciones impositivas. “Probablemente tenían billetes guardados bajo el colchón”, señaló, y detalló cómo se duplicaron las escrituras de propiedades y los patentamientos. A la vez, mencionó la caída del consumo de bebidas, lácteos y hasta yerba: “Postrecitos y gaseosas ahora son un lujo. Miren las fechas de vencimiento. Son cada vez más cortas”, acotó di Natale.
El conductor agregó que incluso las marcas propias de supermercados bajaron un 11% en ventas. “Cuando ni siquiera se eligen esas, estamos hablando de un deterioro muy fuerte”, apuntó. También se registró un cambio en el abastecimiento: productos importados comenzaron a ser más baratos que los nacionales, especialmente en alimentos. “El dólar está pisado y eso distorsiona todo”, completó el abogado Sergio Abrevaya.
D’Alessandro remarcó que esa lógica alimenta una fuga de dólares insostenible. En ese contexto, la comparación con los 90 se volvió inevitable. El periodista Fernando Rosso advirtió: “Parece un menemismo acelerado. La estabilidad del inicio con la pobreza del final, todo al mismo tiempo”. El panel coincidió en que la desigualdad de acceso al consumo está quebrando sentidos comunes y empujando el desánimo social. “Hay un sector que puede veranear en Europa, y otro que no llega a la góndola del supermercado”, dijo el psicoanalista Sergio Zabalza.
La particularidad analizada en el programa dejó expuesta una desigualdad profunda al interior de la población. El consumo adopta actualmente la forma de dos líneas paralelas separadas por una nueva grieta que comienza a abrirse paso, según observaron en el programa. /Perfil
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