Viernes 13 de Junio de 2025, 07:20
A pocas semanas de las vacaciones de invierno en Argentina y entrando en la segunda mitad del año, donde aquellos que planean hacer algún viaje en el verano ya empiezan a evaluar distintas opciones de vuelos, el claro objetivo de cada turista que va a comprar un pasaje de avión es intentar pagarlo lo menos posible, con el objetivo de que el presupuesto del viaje no arranque tan elevado.
El costo de los pasajes aéreos suele ser uno de los gastos más grandes al planificar unas vacaciones, por lo que dominar el arte de cuándo y cómo reservar puede generar ahorros sustanciales.
En un contexto de auge de las aerolíneas regionales y mundiales que anunciaron un importante incremento en la cantidad de vuelos que realizarán desde y hacia Argentina en los próximos meses –reflejo del intenso movimiento turístico internacional del último verano–, los expertos sugieren diversas estrategias para conseguir boletos a precios convenientes, desde desmentir creencias populares hasta aprovechar las herramientas de búsqueda más eficientes.
Cómo conseguir vuelos baratos para ir de vacaciones: la guía definitiva de consejos
Fluctuación constante de precios:
Uno de los factores más impredecibles sobre los vuelos es su precio. "La tarifa aérea es volátil", señala Katy Nastro, portavoz de Going. Los pasajes pueden variar notablemente de un día para otro debido a la demanda, la competencia, los costos de combustible y las tendencias estacionales.
Melanie Fish, vicepresidenta de relaciones públicas de Expedia Group, explica que los precios pueden ajustarse si las aerolíneas no logran vender tantos asientos como esperaban o si algún transportista de bajo costo ofrece tarifas mucho más bajas.
Uso de ventanas de reserva:
Según los expertos, para vuelos domésticos en temporada baja, es aconsejable reservar de uno a tres meses antes, y de tres a siete meses en períodos de alta demanda. Para vuelos internacionales, esta ventana se amplía a dos a ocho meses en temporada baja y cuatro a diez meses durante los picos.
Nastro advierte que si ya te acercas al borde de estas ventanas, es mejor proceder con la reserva, pues es menos probable que la tarifa baje.
Seguimiento y análisis de tus vuelos:
Establecer alertas de precios es una herramienta fundamental. Julian Kheel, fundador de Points Path, recomienda usar Google Flights para recibir notificaciones por email cuando el precio cambia.
Incluso después de haber comprado un boleto, seguir monitorizando es beneficioso, ya que muchas aerolíneas permiten reprogramar sin penalización. Si ves que el precio disminuye, puedes cancelar y volver a reservar más barato.
Días de la semana para viajar:
Aunque han circulado muchas teorías sobre cuál es el mejor día para reservar, los expertos desmienten muchos de estos mitos. Nastro explica que, antiguamente, las aerolíneas cargaban sus tarifas una vez por semana, pero actualmente los algoritmos son más sofisticados.
Mientras que no hay un día perfecto para reservar, sí hay días más económicos para volar, como martes, miércoles y sábados, cuando la demanda suele ser menor.
Meses más baratos para volar:
Los meses de temporada baja de cada país suelen ofrecer tarifas más bajas debido a la disminución de la demanda después de las vacaciones.
Según estudios de Expedia, los precios de los boletos nacionales bajan un 10%, mientras que los vuelos internacionales pueden costar un 15% menos en promedio, aunque incluso podrían ser mayores los porcentajes de diferencia entre temporadas altas y bajas.
Costo del vuelo tardío:
Reservar de última hora puede resultar muy costoso. Las aerolíneas suelen aumentar los precios a medida que se acerca la fecha de salida, conscientes de que los viajeros de negocios suelen reservar tarde sin considerar el costo.
Para viajes internacionales, es mejor reservar tan temprano como sea posible para evitar tarifas elevadas a última hora.
Flexibilidad en la planificación:
La flexibilidad es una virtud en la búsqueda de vuelos económicos. Ser capaz de viajar en días y horas menos demandadas permite acceder a precios más convenientes.
Sophia Lin, de Google, subraya que un "buen" vuelo combina conveniencia, confort y valor, y no necesariamente los boletos más baratos representan los mejores si requieren múltiples escalas o tiempo excesivo de viaje.
Finalmente, ser flexible y, en ocasiones, espontáneo puede conducir a excelentes ofertas.
Kheel sugiere viajar en momentos de menor demanda para encontrar los precios más atractivos.
Si estás dispuesto a aventurarte donde la mayoría no lo hace, puedes conseguir pasajes extraordinariamente baratos. Con estos consejos a mano, planificar tu próxima aventura aérea puede ser más accesible y amigable para tu bolsillo. /iProfesional