Un alza en el precio impactará en el flujo de caja de Vaca Muerta para acelerar las inversiones de sus grandes proyectos exportadores
Momento histórico para Vaca Muerta por la guerra Israel-Irán
Lunes 23 de Junio de 2025, 07:48
El conflicto en Medio Oriente, que recrudeció en las últimas horas con la fuerte intervención armada de los Estados Unidos ante el potencial nuclear de Irán, puede apuntalar el precio internacional del barril de crudo. En especial se debe mirar el movimiento del petróleo Brent que es de referencia para la industria de los hidrocarburos en la Argentina, con la consecuencia que eso tiene en el flujo de dólares para Vaca Muerta y para las cuentas públicas. A valores del viernes, cuando el crudo cerró en los mercados internacionales a unos u$s77 por barril con una baja de casi 2%, aún no se habían registrado los ataques a instalaciones nucleares de Irán, que es uno de los principales productores de petróleo en el mundo, junto a otras potencias regionales como Emiratos Árabes, Arabia Saudita e Irak.
La Argentina que no se acerca aún ni al 1% de la producción mundial de crudo -produce 750.000 barriles diarios frente a más de un millón de todo el mercado- igualmente registra esos movimientos, y por ende su capacidad de desarrollo, algo que busca asegurar para el mediano plazo con la puesta en marcha de varias obras clave de infraestructura de transporte que requieren inversiones millonarias e inéditas para la Argentina de los últimos 50 años. Hasta el momento la producción iraní de petróleo parece no haber sido afectada, pero persiste el riesgo de que ocurra, por lo que eventuales ataques contra refinerías o campos petroleros eleva rápidamente la percepción de riesgo, y en distintas oportunidades el mercado ya demostró que puede protagonizar una escalada hacia la barrera de los u$s100 el barril.
El efecto del ataque de Washington es la incógnita a develar con la reapertura de semana de los mercados, pero en términos locales para analizar cualquier movimiento brusco es necesario tener en cuenta que por cada 5 dólares que cae o sube el precio del barril, el flujo de caja de todo el sector también oscila en unos u$s1.400 millones al año, de acuerdo a estimaciones del economista Nicolás Arceo, director de la consultora especializada Economía y Energía (EyE). Más allá de lo que ocurre en el conflicto entre Israel, Irán y ahora los Estados Unidos, otro factor que se venía sumando es el temor a restricciones en el paso de buques petroleros por el Estrecho de Hormuz, clave para el tránsito mundial del crudo y termómetro del movimiento comercial energético y por ende del precio.
El barril de petróleo, ante la volatilidad externa
Es que al factor precio hay que sumarle el factor volumen y ver qué ocurre con el ecosistema de grandes países productores, como los nucleados en la OPEP, y su reacción política al conflicto. Igualmente, los valores de hoy no llegan a lo que el mercado ya experimentó a comienzos de año, cuando la cotización del brent superó los u$s82 el barril el 14 de enero. A partir de entonces comenzó un rally bajista que llevó el crudo a un piso temporal de u$s60 que encendieron algunas alarmas y mostraron su rápido impacto en el nivel de recaudación de petroleras y estados. Todo eso a pesar de las tensiones que se mantuvieron por la confrontación entre Rusia y Ucrania, y la afectación tanto desde la oferta de Moscú como gran productor como de la demanda de los países europeos.
En ese contexto, el alza en la cotización del crudo no es una mala noticia para un país que empieza a exportar crecientes volúmenes del recurso, y esta combinación de precios del petróleo en suba o a valores altos entre los u$s75 y u$s80 dólares, sin dudas son un motivo para acelerar la velocidad de desarrollo de Vaca Muerta, cuya concreción no se discute en la industria sino que solo se analiza con qué dinámica terminará dándose. Llevado a la práctica en cifras, en el primer cuatrimestre del año el superávit comercial del sector energético totalizó u$s2.684 millones, un 10% más que en idéntico período del año pasado. Sin embargo, en abril la balanza comercial energética arrojó un saldo superavitario de u$s573 millones, observándose una disminución frente a marzo como a abril de 2024.
La reducción del monto exportado en abril 2025 con relación a lo verificado en idéntico mes del último año se explica por la disminución de los precios de exportación. En efecto, el precio de las exportaciones de petróleo se redujo un 21%, el de las naftas un 30% y el del gas natural un 7%. De no ser por el aumento de las cantidades exportadas de petróleo (+14%) la disminución del superávit comercial hubiera sido aún más significativa.
Vaca Muerta: inversiones por más de u$s50.000 millones La suba del precio del petróleo, en cualquier circunstancia económica o geopolítica, afecta positivamente las exportaciones de crudo y derivados de la Argentina, impactando de forma directa en el flujo de caja de las petroleras, de las provincias por el incremento de las regalías y del Estado nacional por el efecto retenciones y el aporte a un superávit comercial de la balanza energética. Pero ese precio del crudo alto también se refleja en el volumen y velocidad de las inversiones de las operadoras de Vaca Muerta, las que llevan adelante un conjunto de proyectos millonarios que superan largamente los u$s50.000 millones para fines de la década, tanto en infraestructura de transporte como en inversión de capital para el incremento de producción que, con el mercado interno satisfecho, se destina por completo a los mercados externos. Si bien hay un consenso inicial de que con un barril a u$s45 los principales desarrollos del no convencional en la Argentina son resilientes, es decir que aún son económicamente viables, no es el escenario ideal para poder contar con un excedente de caja suficiente para afrontar el costo de obras como la plataforma de exportación del Vaca Muerta Oil Sur (Vmos) que lleva adelante un consorcio de siete grandes petroleras encabezadas por YPF. Otro tanto sucede con la proyección de Gas Natural Licuado (GNL) que cuenta con tres etapas sucesivas de exportación de shale gas que llevan adelante los consorcios conformados detrás de la empresa Southern Energy, con Pae y la noruega Golar a la cabeza, y los otros dos con YPF y sus socios internacionales como la angloholandesa Shell y la italiana Eni. En conjunto, el proyecto "Argentina LNG" implica unos 30 millones de toneladas anuales de exportaciones, equivalentes a unos 120 Mmm4/día de gas, es decir casi el doble de lo que hoy produce el país, y que representarán ingresos por unos u$s15.000 millones al año de ingreso de divisas, y otro tanto se puede esperar de ingresos por exportaciones de shale oil. /iProfesional