Jueves 03 de Julio de 2025, 23:23
Lo que comenzó como un episodio insólito y aparentemente trivial se transformó en uno de los temas más comentados en
redes sociales en los últimos días. La historia tuvo como protagonista a
una joven que, luego de una primera cita con un chico, vivió un intercambio inusual al regresar a su casa. Todo cobró relevancia cuando ella decidió compartir su experiencia en X (ex Twitter), donde rápidamente
se volvió viral y desató un encendido debate sobre las costumbres y expectativas en los encuentros románticos iniciales.
El foco del asunto fue un
mensaje de WhatsApp que la usuaria @LuliLiberal recibió tras llegar a su casa. Ella le había agradecido al chico por la salida, comentándole que la había pasado bien. Sin embargo, su respuesta la desconcertó:
él le pidió que le transfiriera 800 pesos por un paquete de chicles que habían comprado durante la cita, justificando que “te los quedaste vos y yo solo agarré uno”.
Sin disimular su sorpresa, la joven decidió publicar una
captura de la conversación, acompañada de una frase irónica:
“¿Luli, por qué estás soltera?”, dejando entrever su desaprobación ante el pedido.
Aunque respondió al reclamo y realizó la transferencia, dejó clara su
incomodidad. En la imagen que difundió se puede leer su mensaje: “Bueno, ahí te lo paso”, seguido por el comprobante del pago. El joven agradeció la transferencia, pero para ella, ese gesto fue una muestra de falta de cortesía y, quizás, una
pista de por qué su vida amorosa no avanza.
La anécdota del
“dinero de los chicles” no tardó en encender las redes. Miles de usuarios reaccionaron, y la historia se convirtió en el punto de partida de una
discusión más amplia sobre las dinámicas económicas en las primeras citas. Para muchos, el pedido fue visto como
tacaño y poco caballeroso, señal de una actitud que podría anticipar problemas en una relación futura.
Las opiniones se dividieron: mientras algunos defendían al chico con el argumento de que "cada peso cuenta" y valoraban la honestidad financiera, la mayoría de los comentarios criticaron el gesto como innecesario e incómodo. Muchos alentaron a la joven a alejarse y afirmaron que merecía mejores experiencias.
“¿De verdad te pidió la plata de los chicles? ¡Hacete un favor y salí de ahí!”, “Eso no es ser transparente, es ser miserable”, y “No le tendrías que haber pasado nada” fueron algunos de los mensajes más destacados. Otros incluso especularon con que el joven quizás no la había pasado tan bien en la cita y ese fue su modo de marcar distancia.
La publicación no sólo se viralizó en X, sino que también fue replicada en otras plataformas y medios digitales, sumando nuevas voces al debate sobre las
“reglas no escritas” en las primeras salidas. Por un día, un paquete de chicles bastó para encender una
conversación global sobre generosidad, expectativas y las complejidades de conocer a alguien en tiempos digitales.