Sábado 26 de Julio de 2025, 15:07
Durante el partido de Boca ante Auckland City en el Mundial de Clubes —el 24 de junio, en Nashville—, Paula Seminara presentó una denuncia penal contra Cristian Riquelme, empleado del club y hermano de Juan Román Riquelme. Según su relato, fue víctima de agresiones verbales y físicas dentro del estadio. Desde el entorno del acusado niegan categóricamente los hechos y preparan una demanda por calumnias e injurias.Seminara, socia con trayectoria dentro del club, detalló que fue agredida mientras estaba sola en la platea del estadio Geodis Park, rodeada por miembros de la delegación oficial. Según consta en la denuncia y videos aportados, Riquelme habría reaccionado cuando la mujer tomó su celular: “Putita, mirá bien lo que vas a filmar, seguí grabando las asambleas y te va a ir mal, y avisale a tu novio que también le va a ir mal, puta”. Luego, habría empujado suavemente su hombro con dos dedos.
“El problema llegó después” cuando grababa a Nicolás Figal, no en cancha, sino desde otro palco.
Tras la agresión, Seminara se comunicó con la policía local y formalizó la denuncia en Argentina ante el Ministerio Público Fiscal de la Ciudad. Solicitó medidas cautelares para impedir cualquier contacto con Riquelme, e informó que elevará próximamente una nota al Departamento de Inclusión e Igualdad de Boca Juniors.
Según Seminara, ella llegó al estadio con anticipación, saludó a dirigentes del club y estuvo en compañía de un periodista hasta que él se retiró. Cuando volvió con una pizza, comenzó el incidente. Refirió que ocurrió cuando ella grababa discreta y que “en el ambiente de la cancha uno se prepara para cualquier cosa, pero en ese momento no estaba lista para algo así”.
Relató que intentó frenar a Riquelme tras el empujón: “¿Qué te pasa? ¿Cómo vas a tocarme? ¿Estás loco?”, y luego regresó para reclamarle explicaciones. En un video se la escucha decir: “¿Por qué no me decís lo que me dijiste recién?”. Riquelme habría respondido: “No hagas show con el celular. Me llamo Cristian Riquelme, viniste a payasear con el celular para grabar videitos para tu novio”. Otros dirigentes intentaron disuadirla para evitar confrontaciones.
Desde su entorno, se sostiene que Riquelme simplemente le pidió que no filmara de manera insistente y que nunca lo tocó ni proferió insultos. Niegan haber recibido notificaciones formales por parte de autoridades judiciales, y señalan que la denuncia forma parte de disputas internas en Boca. Planean una carta documento a Seminara y una demanda legal contra ella.
Seminara continúa viviendo un momento delicado. Explicó que la denuncia no es un hecho aislado: “Esto fue la gota que rebasó el vaso… no puedo soportarlo más”. Por eso presentó una solicitud ante la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas n.º?18 para que le otorguen medidas de protección y se evite cualquier hostigamiento, incluso en redes sociales.
El caso ya motivó una investigación, y ahora la justicia espera definir si concede medidas cautelares. Mientras tanto, Boca aún no se manifestó –aunque la situación vuelve a salpicar al club y a su dirigencia– en un momento ya difícil por la crisis deportiva. /
La Nación