Drogó a su vecina y la violó junto a otros dos hombres: uno tenía una tobillera y un error los delató
Martes 18 de Noviembre de 2025, 09:20
La Justicia formalizó los cargos contra dos sospechosos de un ataque sexual agravado, mientras un tercer implicado permanece sin ser identificado.La víctima había salido unos minutos de su casa para comprar bebidas cuando se cruzó con un vecino al que conocía y otros dos sujetos. Según la fiscalía, el grupo le ofreció un vaso de fernet y, tras ingerirlo, la mujer comenzó a sentirse descompuesta. En lugar de ayudarla, los hombres la sujetaron y la llevaron por la fuerza hasta la casa del vecino, ubicada a pocos metros.
Dentro de la vivienda se produjo la violación. La mujer logró escapar, aunque dejó allí una campera con dinero. En la confusión tomó por error un buzo que no era suyo. Ese detalle terminó siendo clave: al llegar a su casa, sus familiares hallaron en un bolsillo un DNI y un dispositivo compatible con una tobillera electrónica con GPS. El documento pertenecía a uno de los agresores, quien debía llevar la tobillera por una causa previa de violencia de género.
Con esa prueba, la fiscalía identificó rápidamente a dos de los presuntos atacantes: el dueño de la casa y el portador de la tobillera. Ambos fueron acusados por abuso sexual con acceso carnal agravado por la participación de varias personas. El tercer implicado aún no fue ubicado.
Los estudios médicos confirmaron lesiones compatibles con abuso sexual y la psicóloga del SAVyT constató síntomas de afectación emocional en la víctima. Además, el análisis del dispositivo electrónico ubicó al acusado en el lugar y horario del hecho.
El juez de garantías Luis Giorgetti aceptó los cargos y ordenó tres meses de prisión preventiva para los imputados, al considerar que existe riesgo para la víctima y posibilidad de fuga. También fijó cuatro meses para completar la investigación.
Durante la misma audiencia, uno de los acusados sumó otra imputación: un intento de hurto ocurrido semanas atrás, cuando ingresó a un comercio tras trepar un paredón de cuatro metros. Por ese caso, además, se le prohibió acercarse al local en un radio de 200 metros.
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