Viernes 05 de Diciembre de 2025, 15:12
Antes de viajar nuevamente a Europa junto a su esposa,
Daniela Christiansson,
Maxi López se detuvo en el aeropuerto para hablar en Intrusos. Esta vez, lejos de su faceta más descontracturada,
eligió un tono serio para revelar cuál fue la conversación privada que tuvo con Wanda Nara al llegar a la Argentina y que marcó un antes y un después en su vínculo.
“Hubo un proceso largo con Wanda.
Pasamos por muchos momentos. Maduramos, dejamos atrás las diferencias, y era algo que yo buscaba hace mucho. Hace años quería tranquilidad para darle estabilidad a los chicos. Nos costó mucho”, comenzó el exfutbolista, con total franqueza.
En la misma línea, se refirió a la distancia entre
Mauro Icardi y Wanda, tema que generó polémica: “
Que no esté Icardi en la vida de Wanda ayudó a que ella se diera cuenta de algunas cosas. Hay momentos que te golpean, te marcan y te resetean: temas de salud, problemas que iba a afrontar de nuevo. Todo eso te hace mirar a tu alrededor”.
Maxi también contó cuál fue el pedido de Wanda que definió el rumbo de su relación actual:
“Me dijo que necesitaba que tengamos buena relación, que estemos más cerca y que trabajemos para los chicos. Era lo que yo quería hace tiempo”.
Aunque evitó dar detalles de conflictos pasados, dejó entrever que hubo situaciones profundas detrás de las tensiones con Icardi: “Viví muchas cosas y sé muchas cosas que no quiero contar porque no quiero volver atrás. Si algún día Wanda decide hablar, será decisión de ella. Icardi puede haber hecho un montón de cosas, pero hay un motivo para eso que solo nosotros dos sabemos”.
Aun así, dejó claro que su prioridad es otra:
“Hay que tener un ámbito de tranquilidad para que los chicos estén bien. Hablo por mí: para mí, ellos son lo más importante”.
López destacó que la transformación en su relación con Wanda llegó gracias a una charla adulta, sincera y sin rencores mediáticos. Ese encuentro, según explicó, fue el punto de quiebre para reconstruir la armonía que hoy muestran públicamente y que, asegura, sus hijos sienten y valoran.
Con un discurso más reflexivo que explosivo, Maxi dejó en claro que su foco está puesto en consolidar esa paz familiar que les costó tantos años alcanzar. “Pasamos por muchas cosas”, concluyó, sin cerrar del todo la puerta a los misterios del pasado.