Viernes 05 de Diciembre de 2025, 22:43

Se avecina un trimestre que podría registrar marcas térmicas superiores a lo habitual en 17 provincias.
El calor extremo, que parecía demorarse en el arranque de la temporada, finalmente se asentará en gran parte del país y marcará el pulso del verano que se extenderá durante los próximos tres meses. En medio de este escenario,
Tucumán aparece como una de las provincias donde los efectos del fenómeno climático tendrán un matiz particular.Según el último Pronóstico Climático Trimestral difundido por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), gran parte del territorio argentino registrará entre un 40% y un 50% más de temperatura respecto de los valores habituales para esta época del año. Sin embargo, el Noroeste Argentino —y en especial Tucumán— se perfila como una excepción en ese mapa de calor.
Tucumán: temperaturas dentro de los valores normalesDe acuerdo con el informe, provincias como Jujuy, Salta, Tucumán, Catamarca, La Rioja, Corrientes y Misiones no presentarían anomalías significativas en cuanto a temperaturas. Es decir, los valores térmicos se mantendrían dentro del rango considerado normal según los registros de años anteriores.
Esto implica que, si bien las jornadas serán calurosas —como es habitual en el verano tucumano—, no se prevén picos extraordinarios asociados a las olas de calor más intensas que afectarán a otras regiones del país.Dónde sí se observará un cambio marcado es en el régimen de precipitaciones. Para Tucumán, el SMN anticipa una probabilidad del 45% al 50% de lluvias por encima de lo normal durante el trimestre diciembre 2025–febrero 2026.
La presencia del fenómeno La Niña —que suele asociarse a déficits hídricos en amplias zonas de Argentina— tendrá un comportamiento diferente en el NOA. Según explicó el vocero del SMN, Maximiliano Vita, mientras el Litoral podría enfrentar una merma considerable de agua, en provincias del noroeste las precipitaciones se ubicarían por encima del promedio.
“Estas condiciones no afectan por igual a todo el país. En el noroeste, por ejemplo, esperamos precipitaciones superiores a lo normal, mientras que en la zona del litoral lo más probable es un déficit hídrico”, señaló Vita.
Para Tucumán, este escenario se traduce en un verano más húmedo, con mayor frecuencia de tormentas y acumulados mensuales que podrían superar cómodamente los 100 milímetros históricos de enero y febrero. Esta situación podría favorecer la recuperación de reservas de agua en suelos y ríos, pero también aumentar el riesgo de lluvias intensas en cortos períodos, algo característico de la región.
Mientras tanto, provincias como Córdoba, Santa Fe, San Luis, La Pampa, Buenos Aires o Río Negro enfrentan una probabilidad de entre 45% y 50% de temperaturas más altas de lo habitual. Mendoza, San Juan, Entre Ríos, Chaco, Formosa y Tierra del Fuego se ubican un escalón más abajo, con un incremento probable del 40% al 45%.
En materia de precipitaciones, el contraste también es claro: Misiones, Corrientes, Santa Fe, Entre Ríos y buena parte de Buenos Aires podrían recibir hasta 50% menos lluvias que las esperadas para esta época del año.
Qué esperar en Tucumán-Temperatura: Normal para el verano, sin anomalías significativas.
-Lluvias: Aumento del 45% al 50%, con más tormentas y días de precipitación.
-Contexto nacional: Mientras el centro y sur del país enfrentan calor extremo y sequía, el NOA, incluido Tucumán, vivirá un verano más húmedo de lo habitual.
Con este panorama, la provincia deberá prepararse para un comienzo de año marcado no solo por el calor tradicional, sino también por lluvias más frecuentes que podrían modificar la dinámica agrícola, urbana y productiva del territorio.
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